El ‘mercado de la miseria’ se traslada a Sant Antoni

La Guardia Urbana de Barcelona desmanteló el bautizado como mercado de la miseria, por el tipo de productos que se vendían, a finales de marzo. Las decenas de personas que se instalaban en los alrededores de la plaza de Les Glòries y vendían en improvisados tenderetes o directamente en el suelo trataron de burlar el control policial, que impedía que se colocasen en la zona. Desde hace varias semanas, parte de esos vendedores se han instalado en las inmediaciones del mercado del barrio de Sant Antoni. Como en Les Glòries, carecen de la licencia municipal y se apostan en la calle para vender ropa, productos electrónicos y demás enseres.

La Guardia Urbana intenta disuadir la presencia de los vendedores con el patrullaje, jugando al gato y al ratón. Cuando no lo logran, explica una portavoz municipal, y después de advertirles en más de una ocasión, les acaban sancionado. Ese fue el caso ayer de varios grupos de personas que intentaban dar salida a sus productos en la zona de Sant Antoni. Los agentes, algunos de ellos de vestidos de paisano, también requisaron parte del material.

La lucha contra la venta ambulante irregular en la calle es uno de los objetivos del Ayuntamiento de Barcelona, que después de desmantelar el mercado informal de Les Glòries, donde está el histórico mercado de Els Encants, se centró en atajar la venta ambulante en el paseo de Joan de Borbó, en el frente marítimo de la ciudad. Con presión policial de Guardia Urbana, Mossos y policía portuaria, se logró disuadir a los centenares de manteros que durante meses vendían sus productos a los turistas que paseaban por la zona.