La mitad de colegios de Barcelona supera los límites de contaminación
Eixample Respira promueve una herramienta que estima la contaminación para pedir medidas urgentes en los entornos de centros educativos
La plataforma Eixample Respira ha hecho pública una web con datos estimados sobre la contaminación del aire en el entorno de los colegios de Barcelona para visualizar cómo la polución afecta a los niños. Según esta herramienta, elaborada a partir de datos de la empresa tecnológica Lobelia, en los últimos 16 días, el 50% de las escuelas superaron en horario lectivo los niveles de contaminación recomendados por la Unión Europea. Además, en el caso del Eixample, todos los colegios están por encima de los 40 microgramos de dióxido de nitrógeno, límite marcado por la UE. El Ayuntamiento no ha valorado estos datos.
Los promotores de la iniciativa admiten que los datos que aparecen en la herramienta digital no pueden tomarse al pie de la letra al 100% porque se trata de una estimación hecha a partir de las estaciones de medición oficiales situadas en varios puntos de la ciudad. Pero defienden que sí sirve para demostrar que la mayor parte de centros escolares están situados en zona de elevados índices de contaminación.
Datos de la calidad del aire de la ciudad
Eixample Respira ha creado una herramienta que estima la calidad del aire usando datos de la empresa tecnológica Lobelia. Con un equipo de científicos, ingenieros y desarrolladores, esta empresa ha creado, con fondos europeos, un mapa interactivo de las concentraciones de NO2 y PM en la calle (disponible en Barcelona, Ámsterdam y Madrid), resultado de un algoritmo que combina datos de fuentes de datos de las estaciones, tráfico, densidad de población, meteorológicos y observaciones de Copernicus). La aplicación permite obtener información de cualquier punto de la ciudad y lo que ha hecho Eixample Respira es localizar todas las escuelas para llegar a los datos concretos.
El portavoz de la plataforma Eixample Respira, Guille López, explica que han creado esta herramienta para “concienciar a los vecinos de que la contaminación es un problema grave” y “demostrar que hay una correlación directa entre el tráfico y la contaminación”. En este punto, alerta de que muchas escuelas de la ciudad están situadas en calles muy transitadas, especialmente en el Eixample. Los datos de este distrito son “alarmantes” porque indican que los niños respiran cada día en horario escolar un aire con unos porcentajes de dióxido de nitrógeno nocivos para la salud, por encima de los límites recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La administración no facilita datos de los niveles de contaminación en los centros educativos. Por este motivo Eixample Respira, plataforma ciudadana nacida el pasado marzo para reivindicar un aire limpio en el centro de la ciudad, ha decidido tomar la iniciativa. “La sociedad civil organizada, las familias, ponen en conocimiento de la ciudadanía un mapa dinámico de la contaminación en todas las escuelas de Barcelona donde se informa de los niveles de contaminación por NO2 en horario escolar”, añade López. Estos datos están publicados en la web Contaminació.cat y se actualizan diariamente. Se pueden filtrar por distritos, por etapas educativas y están especificados por centros, están incluidos hasta 750 de todo Barcelona. De forma que todos los ciudadanos pueden ver, siempre de forma estimada, la calidad del aire que están respirando sus hijos cuando están en el colegio.
La herramienta permite consultar datos de 2018. Las cifras indican que 227 de los 750 colegios de Barcelona, es decir, un 30%, superaron en horario escolar el nivel máximo de contaminación de NO2 recomendado por la OMS y establecido como máximo legal por la legislación europea (40 microgramos). En el distrito del Eixample, el 92% de los colegios registraron niveles de polución superiores a los límites durante las horas lectivas el año pasado. El otro distrito con peor calidad del aire fue Ciutat Vella, donde el 70% de centros superaron los límites. En cambio, en zonas de menos tráficos, las escuelas están menos afectadas por la contaminación. Solo el 1% de colegios de Nou Barris superaron los límites y en Sarrià-Sant Gervasi fueron el 13%, mientras que en Horta-Guinardó el 4%.
Paralelamente a la publicación de estos datos, la plataforma está promoviendo la adhesión de los colegios y las asociaciones de familias a una carta dirigida al Ayuntamiento de Barcelona, donde critican que “ante una evidencia científica clara no se hayan tomado medidas urgentes contra la contaminación y sigan superándose desde 2010 los límites legales establecidos por la normativa europea”. Hacen especial énfasis en la exposición continuada de los pequeños, puesto que “produce un retraso en el desarrollo cognitivo y neuronal de los niños, ya desde el embarazo, que a menudo es irreversible”, apuntan.
Según los cálculos obtenidos, alertan que “un 37% de la dosis diaria de hollín -partículas más pequeñas de 2,5 µm originadas en la combustión, que tienen efectos importantes sobre la salud de las personas- que reciben los niños es en el interior de las escuelas”. Por eso, piden medidas para descontaminar los centros y sus entornos, entre las cuales citan una reducción drástica del tráfico alrededor de los centros escolares; la eliminación de las plazas de aparcamiento de los accesos a los centros, incluidas las de motos en la acera, e incrementar el espacio para peatones y verde, o una auditoría individualizada en las escuelas para abordar con medidas paliativas la problemática de la contaminación atmosférica.
Esta semana la revista The Lancet alertó de que la contaminación puede poner en riesgo la salud de los niños para toda su vida, ya hace tres años que Jordi Suñer, investigador y catedrático de Medicina del Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal), vinculó la contaminación con una disminución de la atención de los niños en clase, de modo que afecta a su desarrollo cognitivo.
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