La nueva jornada de protestas deriva en cortes de calles

Y al séptimo día, las protestas en Barcelona derivaron en cortes de calles. Fue el efecto del picnic convocado en los alrededores de la Delegación del Gobierno para protestar contra la sentencia del procés, que terminó ayer sin incidentes, pero con mucha basura en la calle. Los convocantes instaron a llevar bolsas para lanzarlas al “basurero de Mallorca con Llúria”. Esto es, donde está la sede del Gobierno central en Barcelona. La semana de protestas en Cataluña deja 600 heridos y 78 detenidos que han pasado a disposición judicial.

Unas 2.700 personas, según las cifras de la Guardia Urbana de Barcelona, respondieron a la llamada de la plataforma Picnic per la República para concentrarse a las puertas de la Delegación del Gobierno. Era la principal convocatoria para la jornada de ayer de las protestas contra la sentencia del Tribunal Supremo. La indicación era llevar consigo bolsas de basura y lanzarlas a los pies del edificio como símbolo de que “España da asco”, explicaban los convocantes. Aunque un cordón de Mossos d’Esquadra impidió acercarse a la Delegación del Gobierno, los manifestantes sí lanzaron centenares de bolsas por encima de la línea policial. El acto terminó entonando Els Segadors, el himno de Cataluña.

Las primeras gotas de lluvia comenzaron a dispersar a una parte de los manifestantes antes de terminar el acto, aunque un numeroso grupo continuó la manifestación, que tuvo un aire más festivo y con mayor proporción de gente mayor que en protestas anteriores. Ayer apenas se podían ver manifestantes encapuchados, protagonistas esta semana de los enfrentamientos con los efectivos de la Policía.

Una vez desactivada la movilización cerca de la Delegación del Gobierno, más alejado de lo ideado inicialmente a causa del cordón policial formado por los Mossos d'Esquadra para blindarla, el grupo continuó su protesta por diferentes puntos del centro de Barcelona. En su camino, los congregados repitieron las proclamas de “Buch, dimissió”, en referencia al consejero de Interior, “Llibertat presos polítics” y “Catalunya Antifeixista”.

Primero subieron en dirección hacia la avenida Diagonal, donde protagonizaron diversas sentadas en el centro de la vía que impidieron el paso de vehículos. Después, la convocatoria siguió por el paseo de Gràcia hasta la plaza de Urquinaona, que se ha convertido en los últimos días en una de las zonas centrales de las protestas y de los disturbios con los cuerpos policiales. Y desde allí, las 2.000 personas que seguían en la improvisada marcha tomaron camino hacia la Via Laietana, con la intención de aproximarse a la sede de la Jefatura de la Policía Nacional en Cataluña, donde estaban concentradas al cierre de esta edición.

Las manifestaciones convocadas en diferentes puntos de Cataluña obligaron a efectuar cortes de circulación en la C-16 en Berga, la C-17 en Ripoll y en la avenida Meridiana, principal entrada a Barcelona por el norte. En otra carretera, la C-60 en Argentona, un joven sufrió una posible rotura de rodilla tras ser atropellado por un conductor que circulaba por el arcén y que huyó después del suceso.

Prohibición de drones

Los Mossos d'Esquadra advirtieron ayer de que durante los últimos días, con ocasión de los disturbios, han detectado 85 drones no autorizados sobrevolando Barcelona. La policía autonómica recordó que está vigente una “restricción aérea concreta” debido a la situación que vive Cataluña tras la sentencia del procés.“No está permitido el vuelo sobre edificios, personas ni tampoco de noche, además de en las zonas restringidas, como aeropuertos o infraestructuras críticas”, recordaron los Mossos. El viernes se detectaron 53 drones y el sábado, 32.