El juez rechaza que el sospechoso del crimen de Susqueda se someta al polígrafo cerebral
El magistrado considera que existen dudas sobre la eficiacia y veracidad de los resultados
El Juzgado de Instrucción 2 de Santa Coloma de Farners ha denegado que el investigado por el doble asesinato de Susqueda se someta al polígrafo cerebral conocido popularmente como test de la verdad. El auto del juez, que resuelve la solicitud de diligencias solicitada por la Fiscalía, sí admite la otra docena de nuevas pruebas que pretenden acreditar que Jordi Magentí es el autor de los crímenes. Tanto la acusación pública como la defensa han anunciado que recurrirán a la Audiencia Provincial.
Para reforzar la carga de prueba contra el vecino de Anglès de 61 años, que fue puesto en libertad por la sección cuarta el pasado mes de diciembre, el fiscal solicitó al Juzgado en su informe ampliatorio de diligencias de prueba, el sondeo cerebral y una docena de pruebas testificales, periciales y documentales.
El juez ha desestimado la prueba de la verdad porque considera que genera una serie de interrogantes que afectan directamente a su “eficacia” y “utilidad”. Entre ellos, por ejemplo, que “se desconoce cuál es la tasa de error o acierto de la prueba”, ni existe “unanimidad en la comunidad científica sobre ello”. Se desconocen protocolos para su realización que aseguren la eficacia del resultado y cómo pueden influir factores como la edad o enferemedades mentales en el resultado. Estos interrogantes, añade, hacen que “el grado de acierto de sus conclusiones se desconozca” y que su utilidad sea limitada.
Entre las pruebas admitidas está la petición a Google para que determine la navegación de los móviles de las víctimas, Marc y Paula, o si la mujer de Magentí mandó a su país algún paquete, por si contuviera objetos de los chicos que todavía no han aparecido, así como la petición de que los Mossos vuelvan a sumergirse en el embalse en busca del arma del crimen.
Para el despacho Salellas y Asociados, que defiende a Magentí, las pruebas solicitadas por fiscalía y acordadas de carácter pericial no tienen por objetivo investigar los hechos de forma abierta, sino que “sólo buscan desactivar los argumentos de la Audiencia de Girona, que le puso en libertad”. Para garantizar que las pruebas se tomen con objetividad, la defensa pide que no lo hagan los Mossos, sinó unos péritos de Justicia.
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