Pachi Vázquez competirá contra el PSOE desde su nuevo partido, Espazo Común

Tras haberlo sido casi todo en el PSdeG, formación por la que llegó a aspirar a la presidencia de la Xunta y de la que se apeó el pasado diciembre denunciando haber sido traicionado y vetado por la dirección, el ex secretario general de los socialistas gallegos, Manuel Pachi Vázquez(O Carballiño, Ourense, 1954) ha creado nuevo partido: Espazo Común (el nombre de la corriente del PSOE con la que fracasó en su batalla por la secretaría del PSOE ourensano).

Desde ahí, un “movimiento socialdemócrata, galleguista, progresista y constitucionalista” competirá contra sus excompañeros socialistas en una veintena de municipios de la provincia de Ourense, según ha manifestado este jueves en rueda de prensa en la que ha adelantado su intención de convertirse en llave en el Ayuntamiento de Ourense y garantizar la gobernabilidad de la ciudad, bloqueada durante este mandato del PP en minoría. “No sé con quién llegaremos a acuerdos, pero los habrá”, ha destacado tras arremeter contra el PSOE y precisar que su electorado está en el centro-izquierda que, según sus cálculos, no superará los nueve o diez concejales en Orense “y hay cinco o seis que o están en casa o no tienen una oferta política atractiva”. Su proyecto se volcará ahí.

Tras un cuarto de siglo de militancia en el PSOE, formación a la que llegó procedente del CDS, Vázquez se propone afrontar la recta final de su carrera política desde la pequeña formación que ha fundado rodeado de los exmilitantes socialistas que se han mantenido fieles a él tras una batalla interna, en la provincia de Ourense, que ha durado casi tres décadas y que finalmente se ha saldado con su derrota.

Vázquez asegura contar con un respaldo de más de 400 personas de “amplia trayectoria” política en la provincia de Ourense de entre la que un “60% o 70% pertenecían al PSOE”. Entre quienes mantienen su fidelidad al exlíder socialista, algunos cargos institucionales de la comarca de O Carballiño que han abandonado igualmente el PSOE y que mantienen su escaños en los respectivos grupos de los no adscritos (cuatro concejales de Piñor, entre ellos el exportavoz socialista en la Diputación Francisco Fraga, otros tres de O Carballiño y una de Maceda). Junto a ellos, la exparlamentaria autonómica y exsecretaria de organización del PSOE ourensano, María Quintas.

A todos los que han dado este paso tras él les ha agradecido su “valentía” y les ha prometido el “diálogo, tolerancia, convivencia y compañerismo” que asegura que les impidieron en el PSdeG. Y a los actuales dirigentes les pide “que se olviden ya de nosotros, que no somos el adversario”. “No vamos a entrar en debates”, eludió Vázquez contestar al líder del PSOE ourensano, Rafael Rodríguez Villarino, que lo ha acusado de intentar facilitarle a Baltar la Diputación de Ourense.

Pendiente de juicio por supuesto enchufismo durante su época de alcalde de O Carballiño y sin ocupar cargos desde 2015, cuando dimitió de su escaño en el Parlamento autonómico tras ser imputado, Vázquez se ha descartado como candidato a la alcaldía de Ourense, puesto que, sostiene, ocupará “una mujer con proyección”. No obstante, el exlíder de los socialistas gallegos no ha querido despejar la duda sobre la posibilidad de presentarse en su municipio de O Carballiño en un intento por cerrar el ciclo con el retorno a sus orígenes políticos.