David Madí, el hombre que siempre cae de pie
La mano derecha de Artur Mas preside ahora Aigües de Catalunya para ganar mercado a Agbar
Telefónica, Deloitte, Endesa, Applus y ahora Aigües de Catalunya. Cada vez que David Madí ha salido del consejo de una empresa, su agenda de contactos le ha ayudado a caer de pie. Quien fuera mano derecha de Artur Mas ha sido nombrado presidente de Aigües de Catalunya, filial de Aguas de Valencia, para asaltar el negocio del suministro público y depuración de agua. Madí puede ser clave ante la renovación de concesiones de servicios de agua en la próxima legislatura, pero también para tejer complicidades en un momento en el que se cuestiona la gestión privada del agua.
Su paso por Deloitte coincidió con un aumento de los contratos públicos
Madí no es el primer político que da el salto al sector privado del agua: el exconsejero de la Generalitat Santi Vila fue nombrado en enero director general de Aigües de Banyoles. Madí, a diferencia de Vila, tiene más experiencia moviéndose entre la administración y las grandes empresas, desde sus antiguos cargos políticos con CDC a su posición vigente en entidades públicas como el consejo de administración del Teatre Nacional de Catalunya. Madí fue asesor de Telefónica en Cataluña entre 2013 y 2016. Entre 2011 y 2013, un año después de dejar la primera línea política, fue director estratégico de la consultora Deloitte, época que coincidió con un aumento sustancial de los contratos que recibió la empresa por parte de la Generalitat. Entre 2011 y 2017 fue presidente del consejo asesor de Endesa en Cataluña, cargo que perdió cuando la eléctrica clausuró este organismo. Madí también fue asesor de Telefónica en Cataluña entre 2013 y 2016.
El último cargo que le quedaba a Madí era la vicepresidencia sénior de la compañía de certificación Applus, posición que abandonó el pasado diciembre coincidiendo con el traslado a Madrid de la sede social del grupo y con la investigación sobre Madí por un caso de presuntas facturas falsas a través de dos sociedades suyas. Una de estas sociedades es Nubul Consulting que, según informó Expansión, ya ha sido la responsable de desarrollar el plan estratégico de Aigües de Catalunya. Esta empresa es 100% propiedad de Aguas de Valencia desde que, en septiembre, la catalana Comsa le vendiera el 50% de la compañía. Fuentes del sector destacan la amistad que mantienen Madí y el presidente de Aguas de Valencia, Enrique Calabuig.
Fue vinculado a un gobierno en la sombra durante el ‘procés’
Aigües de Catalunya asegura tener 400.000 usuarios en Cataluña. Tortosa y Martorell —ambas con ayuntamientos del PDeCAT— son las principales ciudades en las que opera. También gestiona el ciclo del agua en una veintena de pequeños municipios catalanes. La dirección de Madí puede ser fundamental para ganar a Agbar algunas concesiones de suministro que deben renovarse en la próxima legislatura. El caso más destacable es el de Sant Cugat, aunque existe la opción de un cambio hacia la remunicipalización si el PDeCAT perdiera peso en el consistorio. La plataforma Aigua és Vida, grupo de presión para remunicipalizar los servicios de abastecimiento de agua, calcula que entre 2019 y 2024 finalizan y se han de renovar —o revertir— unos 25 contratos de gestión privada del agua. Además de Sant Cugat, hay otros municipios en esta situación como Vilassar de Dalt, Tàrrega, Sant Quirze del Vallès o Sant Andreu de la Barca.
Madí ha sido identificado como miembro del gobierno en la sombra del procés. Madí negó en 2017 a EL PAÍS que tuviera nada que ver con este mando alternativo independentista. Pese a ello, numerosos testimonios han asegurado que sí que tuvo un papel, sobre todo como enlace con los fieles postconvergentes de Mas.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.