Imágenes que captan afectos
El Festival de Fotografía Documental de Barcelona reflexiona sobre el amor en 23 exposiciones con un centenar de autores
Fotografiar los afectos y las múltiples formas de amor puede dar pie a un sinfín de posibilidades. Hacerlo con profundidad, en una labor de seguimiento, a veces con proyectos que duran años, ya no es tan habitual. Isadora Kosofsky tomó imágenes del conflicto amoroso que vivieron tres ancianos en Los Ángeles –Jeanie (82 años), Will (84) y Adina (90) con los que se tropezó un poco de casualidad cuando hacía un reportaje fotográfico en una residencia. Para hacerlo les siguió en su día a día y les captó en sus idas y venidas por la ciudad, en la residencia en la que vivía una de ellas, en el piso de la otra, en sus encuentros amorosos, en sus enfados, en sus reconciliaciones y en sus momentos de desesperación. Kosofsky documenta, con sus fotografías en Senior Love Triangle, una relación poco convencional de tres ancianos. El proyecto de la fotógrafa norteamericana, reconocida y premiada por haber tratado a fondo problemas como la salud mental o la violencia de género, es uno de los destacados en el festival DOCfield de Barcelona y se puede ver en los jardines del Palau Robert, una de las sedes principales de la sexta edición del encuentro que se prolongará durante un mes.
Un festival de fotografía documental que este año se ha propuesto reflexionar sobre el amor, en el sentido más amplio de relaciones interpersonales, porque así lo expresaron una amplia mayoría de las 152.000 personas que asistieron a la edición del año pasado. “Nos encontramos con que lo que interesaba más eran las cuestiones universales, los conflictos que se viven en las casas y en la vida normal frente a las guerras o las crisis de los refugiados”, apuntaba Helena Velez, investigadora visual y directora artística de DOCfield. Y esa es la cuestión sobre la que giran las siete exposiciones de la sección oficial del festival de este año, tres de ellas en el Palau Robert y las otras cuatro en el edificio histórico de la Universidad de Barcelona, FNAC Triangle, CC Pati LLimona y Foto Colectania. Además de éstas, hay otras 16 muestras en otras tantas sedes invitadas en diferentes centros de Barcelona.
Una mirada de mujer
La mayoría de las autoras de las exposiciones de la sección oficial del DOCfield de este año son de autoría femenina. “Es posible que el acercamiento a temas como el amor y el afecto sea más propicio para la mirada y los matices de las mujeres”, comentaba Silvia Omedes, impulsora de la Fundación Photographic Social Vision que promueve el festival de foto documental. “En todo caso, en el conjunto de las 23 muestras hay paridad”, añadía la promotora de un festival que organiza visitas comentadas a las principales muestras. Una dedicación de un equipo reducido de personas intensiva y una de las razones por las que este año el DOCfield se ha reducido a un mes.
A cuál más interesante porque todas abordan diferentes formas, conductas y experiencias de expresar los afectos. Probablemente uno de los trabajos más impactantes es La huella familiar, en la que la fotógrafa norteamericana Nancy Borowick refleja la experiencia de sus padres que recibieron tratamientos contra sendos cánceres avanzados y murieron con un año de diferencia. El documental fotográfico tiene de todo: la autorización manuscrita de la madre a ser el foco del reportaje, recuerdos de la familia antes de la enfermedad, las sesiones de quimioterapia de los dos –al padre le detectaron un cáncer de páncreas en fase avanzada cuando la madre ya estaba en tratamiento- los abrazos, las reuniones familiares –entre ellas la boda de la autora del reportaje-, los momentos para las bromas y de alegría, el abatimiento, el dolor, el fallecimiento primero de él y luego el de su madre. Todo un retrato familiar con momentos de cotidianeidad sobre la pérdida y también una historia de amor y despedida de Borowick que utilizó su cámara fotográfica, en cierto modo, como una forma de afrontarlo. Borowick es colaboradora habitual del New York Times y con La huella familiar ha recibido varios premios, entre ellos el segundo de los World Press Photo de 2016 por una de las imágenes del seguimiento de la enfermedad de ambos. Retrato de Familia es la tercera muestra del DOCfield del Palau Robert y se puede ver en una gran vitrina en la entrada del palacio. Se trata de una exposición colectiva que reflexiona sobre las familias - no en el sentido tradicional del término- y su representación.
Bendito es el fruto: la guerra sagrada a los vientres irlandeses es una propuesta de Olivia Harris que reflexiona sobre el problema de las mujeres irlandesas que tenían que abortar en el Reino Unido hasta que se derogó la ley del aborto en mayo pasado. Esa muestra está en el patio de las letras de la Universidad de Barcelona y Belleza Prohibida, de la fotógrafa egipcia Heba Khamis, refleja el dolor y la protección de las mujeres de Camerún que protegen a sus hijas planchándoles los senos para disimular su madurez en un intento de evitar que sean objeto de violaciones.
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