El partido de La Roja se verá en Barcelona en el Camp de l’Àliga

El primer partido del Mundial de Fútbol que la selección española jugará el próximo viernes contra Portugal podrá verse en Barcelona una pantalla gigante en el Camp de l'Àliga, en la plaza de Alfons Comín. Finalmente, el Ayuntamiento no ha cedido ningún espacio, como pedía la entidad Barcelona con la selección, que en 2016 fue multada por instalar una pantalla sin permiso en la plaza de Catalunya durante la Eurocopa. La plataforma ha informado este lunes en un comunicado de que del alquiler del campo de fútbol y el equipo de audio y sonido se harán cargo, como patrocinadores, La Liga y la promotora Valdebebas.

"Estamos seguros de que será la gran fiesta del deporte español a la que esperamos que asistan muchas familias, grupos de amigos, jóvenes y mayores", indica el comunicado. El texto reprocha al ejecutivo de la alcaldesa Ada Colau "que haya denegado todos los permisos presentados a vía pública para ver el Mundial completo". "Solo aceptaba seguir los partidos de semifinal en un pabellón en Montjuïc, pero Barcelona con la selección no ha querido esperar hasta las eliminatorias", añade.

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"Nadie podrá negar que el camino ha sido infinitamente más difícil que el de otros actos donde no aparece la marca España pero finalmente se ha conseguido que se pueda animar la selección española desde el primer partido", celebra la plataforma.

A mediados del mes pasado, el gobierno municipal se comprometió a colaborar para buscar una ubicación, un "espacio cerrado" para seguir los partidos de La Roja, para garantizar la seguridad. Pero el portavoz de la plataforma, Manel Hernández, asegura que en una reunión posterior el consistorio "se presentó sin tener un espacio". De ahí, explica, que optaran por buscarlo ellos y un patrocinador para costearlo. Tras el conflicto con las pantallas en plaza de Catalunya, en 2016 también se pudo ver un partido de La Roja en Arc de Triomf, un acto organizado por Ciutadans dentro de la campaña electoral de las elecciones generales de ese año.

Fuentes municipales replican que no es cierto que el Ayuntamiento no haya colaborado. "El consistorio y la entidad pusieron sobre la mesa varias ubicaciones y acordaron el Camp de l'Àliga porque cumplía los requisitos de aforo, seguridad y convivencia", indican estas fuentes.