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Jesús Montero no repetirá como secretario de Podemos Madrid

Los inscritos elegirán a una nueva y ampliada dirección municipal entre el 8 y el 14 de diciembre

Jesús Montero (dcha.) y Paco Pérez, en rueda de prensa.
Jesús Montero (dcha.) y Paco Pérez, en rueda de prensa.Kike Para

Jesús Montero no optará a la reelección como secretario general de Podemos Madrid. Después de tres años al frente de la formación, Montero ha asegurado este viernes que se va para favorecer la regeneración: “Hay que hacer de la nueva política algo más que una declaración”. La IV Asamblea Ciudadana Municipal se celebrará entre el 8 y el 14 de diciembre. Durante esos días, los más de 51.000 inscritos en la capital podrán votar un nuevo Consejo Ciudadano, que aumentará. Montero ha insistido en la necesidad de revalidar la alcaldía y se ha mostrado optimista con la posibilidad de que Manuela Carmena repita como candidata.

Asaltar los cielos dejó de ser una quimera para Podemos en la capital en 2015. La coalición Ahora Madrid, en la que se integran otras cuatro fuerzas (IU, Equo, Ganemos y Madrid 129), se hizo entonces con la alcaldía. El reto para 2019 es revalidarla pero antes, la formación tendrá que afrontar un proceso interno. Lo hará con el sistema de votación DesBorda, aprobado en Vistalegre II. La elección a la secretaría general se hará mediante candidaturas unipersonales. El proceso de recogida de avales comenzará este 4 de noviembre y el 18 será el último día para presentar candidaturas. El 24 de noviembre comenzará la campaña. De momento, nadie ha manifestado su intención de presentarse, pero todo apunta a que habrá una lista de consenso entre pablistas y errejonistas. Lo que sí es seguro es que el nuevo Consejo Ciudadano estará formado por 27 miembros (ahora son 16), nueve de ellos representantes directos de los 32 círculos.

“No presentarme es una decisión personal. La política no es una carrera profesional, es una actitud”, ha afirmado Montero en un desayuno con periodistas en La Morada. Con su paso atrás busca “dar un nuevo impulso” para revalidar la alcaldía. El aún secretario de Podemos en Madrid ha rechazado la existencia de familias en la formación, pero ha asegurado que trabajará para que haya consenso y una lista única. Montero ha subrayado también que ningún compañero le ha informado de su intención de presentarse a la secretaría. “Yo voy a avalar a aquella persona que una y suponga una renovación. Alguien que proceda de la ciudadanía empoderada y tenga experiencia de gestión y de gobierno”. El favorito es José Manuel Calvo, cercano a Pablo Iglesias como Montero y miembro del actual Consejo Ciudadano, pero su labor como concejal de Urbanismo complican su candidatura.

Una lista unitaria

Los seguidores de Pablo Iglesias en la capital matizan que el proceso aún no se ha abierto, mientras que el círculo más cercano a Íñigo Errejón explica que no hay nada cerrado, “aunque lógicamente existen conversaciones”. Lo que sí parece seguro es que la portavoz del Gobierno municipal, Rita Maestre, cercana a Errejón y que ya concurrió a las primarias regionales que acabaron encumbrando a Ramón Espinar, no se presentará al proceso. “Ahora toca gobernar. Para revalidar hay que gobernar. Si nos ponemos a hablar de sucesiones no gobernamos y, si no gobernamos, no revalidamos”, sostiene Montero. El Ayuntamiento de Madrid, con más de 4.000 millones de presupuesto, es la Administración más importante que gobierna Podemos, de ahí su importancia estratégica.

Una parte de Ahora Madrid reconoce “aristas” en la tarea de gobernar. Las diferencias han sido patentes en varias ocasiones, como en noviembre de 2015, cuando se aprobó la demolición del Taller de Precisión de Artillería. Ese día seis concejales de Manuela Carmena votaron en contra del proyecto. La aplicación de la Ley de la Memoria Histórica también originó diferencias en el grupo municipal y acabó con la concejal Celia Mayer relegada de su delegación. En julio, Podemos expedientó a Mayer y a otros seis ediles por no adherirse a su carta financiera. Todos ellos pertenecen a colectivos integrados en Ahora Madrid, pero no mantenían “relación orgánica” con la formación de Iglesias.

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La operación Chamartín, un plan urbanístico en el norte de la capital varado durante los 24 años de gobiernos del PP, ha sido el último caballo de batalla. En julio, la alcaldesa oficializó un pacto con el Ministerio de Fomento para su desarrollo que fue muy criticado por una parte de Ahora Madrid. A la queja se sumaron los Anticapitalistas, el tercer sector con más representación en Podemos (sus cabezas más visibles en Madrid son la parlamentaria Isabel Serra y el eurodiputado Miguel Urbán). El objetivo de pablistas y errejonistas es sumarles en la pretendida lista unitaria. De momento nadie se ha puesto en contacto con ellos, aunque aseguran que solo llegarán a un acuerdo programático, no de nombres ni de cuotas. Además de la operación Chamartín, los Anticapitalistas quieren debatir el modelo organizativo y la relación con el PSOE. Mientras tanto, este lunes Podemos Madrid comienza sus cinco encuentros interdistritos, que se desarrollarán hasta el 15 de noviembre.

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