La Fundación Miró abre sus puertas tras diez días de huelga

Después de diez días sin poder abrir sus salas de exposiciones, la Fundación Joan Miró de Barcelona volvió a funcionar con normalidad ayer después de que los trabajadores de la empresa externa Serveis Educatius Ciut’art desconvocaran la huelga que han mantenido desde el pasado 24 de octubre. La reapertura se produjo después de que los trabajadores afectados “hayan llegado a un acuerdo con la empresa (Ciut’art)”, explicaron fuentes de esta empresa de servicios especializada en la atención al público de museos, centros culturales y salas de exposiciones. La huelga también ha finalizado en el Archivo Histórico de Barcelona después de 78 días.

El conflicto no ha impedido que la biblioteca, la cafetería y la tienda del centro abrieran con su horario habitual, pero si poder inaugurar y poder ver la nueva exposición de la temporada, Sumer y el paradigma moderno, que no pudo ser inaugurada por coincidir el acto con el inicio de la huelga. “Nuestra idea es recuperar el funcionamiento normal lo antes posible y eso comportará convocar a los medios para presentar la nueva exposición o al menos que el comisario, Pedro Azar, la explique, aunque ya se pueda visitar desde hoy”, explicaron este viernes fuentes de la Fundación Miró, el centro que atesora una de las colecciones más grandes del artista. En un comunicado emitido ayer, el centro “agradece el esfuerzo de todas las partes implicadas para encontrar una solución al conflicto” e insiste en que solo han permanecido cerradas las salas de exposiciones. “Se ha podido acceder al Patio norte, un balcón sobre Barcelona que ofrece unas de las vistas más privilegiadas de la ciudad, y ha proyectado en su auditorio un programa de documentales sobre Joan Miró y Josep Lluís Sert, arquitecto del edificio de la Fundación”. También ha funcionado con normalidad el departamento educativo que ha mantenido el calendario previsto de actividades programadas.

Desde la fundación no han querido facilitar datos de cómo ha repercutido económicamente la huelga. “Es pronto para hacerlo. Lo importante es que todo funcione bien”, aseguran.

Ferran Barenblit y Josep Maria Carreté, director y gerente del Macba, el otro museo barcelonés que se ha visto más afectado por la huelga del personal de la empresa Ciut’art aseguraron que tras 66 días de huelga del personal que se encarga de la venta de entradas y los servicios educativos, se dejó de ingresar 275.000 euros y sufrió una reducción del 37% de los visitantes.

El 21 de octubre se acabó la licitación de la empresa Ciut’art en el Macba pasando a ejercer estos servicios Magma Cultura que se comprometió, según las bases del concurso, a subcontratar a los trabajadores de Ciut’art. Nueve días después, el 30 de octubre, estos trabajadores decidieron “valorando los progresos realizados y con tal de dar un tiempo necesario por la resolución de los puntos que siguen abiertos” suspender hasta el día 12 de noviembre incluido la convocatoria de huelga y el inicio de la cual estaba previsto para el 1 de noviembre de 2017, por lo que el conflicto en este museo tampoco acaba de estar cerrado.