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Una ruta por Madrid, desde el Paleolítico a la Guerra Civil

La región conserva numerosos yacimientos de diferentes culturas y épocas

Ruinas del yacimiento de la Dehesa de la Oliva, cerca de Patones de Abajo.
Ruinas del yacimiento de la Dehesa de la Oliva, cerca de Patones de Abajo.DIEGO SALVADOR

Desde una cueva del Paleolítico hasta una presa del siglo XIX pasando por asentamientos y edificaciones de los carpetanos, romanos, visigodos y árabes. Por la región de Madrid han pasado multitud de culturas a lo largo de la historia y gracias a los yacimientos arqueológicos podemos saber más sobre estos habitantes pretéritos. El historiador Diego Salvador recopila en su libro Itinerarios Arqueológicos Madrileños (Ediciones La Librería) algunos de estos vestigios y propone hasta 23 rutas para conocerlos.

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Cuenta Salvador que hace unos años, y aprovechando que se encontraba en el paro, comenzó a investigar la historia de la Comunidad de Madrid. "Empecé con los yacimientos visitables que propone la Comunidad de Madrid, pero más tarde, a través de otras fuentes, fui descubriendo otros". Y aclara: "En el libro aparecen los que yo he visitado personalmente, aunque existen muchos más". Los yacimientos no están ordenados cronológicamente, sino por proximidad. Así, el interesado puede ver en un mismo día restos arqueológicos pertenecientes a diferentes épocas. "Por ejemplo, el itinerario de la Dehesa de la Oliva, cerca de Patones de Abajo, alberga la cueva del Reguerillo del periodo Paleolítico, un poblado con vestigios carpetanos, romanos e incluso visigodos, una iglesia medieval y el pontón de la Oliva que data del siglo XIX", explica el autor, a quien le gustan más "los asentamientos humildes". "Para aquellos que prefieren yacimientos más imponentes propongo el Foro Imperial y la Casa de Hippolytus en Alcalá de Henares", añade.

La ciudad de Madrid nace como tal durante la dominación árabe en el siglo IX. Fue creada originariamente como fortaleza para vigilar los pasos fronterizos de la sierra e incluso las rebeliones de los habitantes de Toledo. Los trabajos de conservación permiten ahora visitar vestigios de aquella época como la muralla árabe en las inmediaciones de la Cuesta de la Vega, junto al Palacio Real. "En el caso de Madrid capital, la ruta se puede completar en apenas una hora porque la distancia entre localizaciones es muy corta", aclara el historiador.

Salvador quiso que este libro se pudiese utilizar como una guía de turismo, por eso, además de la información histórica, decidió añadir las coordenadas de cada punto de interés y un mapa. "Pretendo evitar que la gente se pierda como me pasó a mí en más de una ocasión", se ríe.

Los últimos restos que se recogen en este ejemplar son de la Guerra Civil como el campamento falangista de Navalagamella y el búnker republicano de la UNED en Las Rozas. "Para que un resto se considere arqueológico deben pasar unos cien años. Sin embargo, decidí incluir estos vestigios de la Guerra Civil por su importancia histórica", explica Salvador, quien lamenta que en Madrid "no haya demasiado interés por la arqueología". "Hay una concepción generalizada de que la capital era una ciudad irrelevante antes de que Felipe II trasladara allí su corte, o porque no hay yacimientos tan potentes como los de Ávila o Soria, por ejemplo, pero, aún siendo más modestos, los de esta región tienen una gran riqueza cultural". Itinerarios Arqueológicos Madrileños puede adquirirse en librerías y puntos de venta por Internet. Salvador espera que el público encuentre esta guía interesante y anima a "coger la mochila y salir a descubrir la historia de la región".

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