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La Policía Nacional asegura que ha venido a Cataluña a “defender la ley, no a dar porrazos”

Cinco sindicatos del cuerpo confían en que los Mossos “no van a apartarse de la legalidad”

Representantes de los sindicatos de la Policía Nacional.
Representantes de los sindicatos de la Policía Nacional.

Cinco sindicatos de la Policía Nacional han comparecido este mediodía en Barcelona para defender el carácter pacífico de su presencia en Cataluña y han incidido en que su papel es de "defensores de la legalidad" y de hacer cumplir los mandatos de policías y jueces. "Hemos venido a defender la ley, no a dar porrazos", han subrayado. Las organizaciones sindicales expresan su apoyo y “admiración” a los agentes desplazados. “No hay tarea más noble y gratificante para un policía nacional que la defensa de la legalidad”, añaden.

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El 1 de octubre "va a ser un día pacífico", ha destacado Mónica Gracia, secretaria general del Sindicato Unificado de Policía. "La policía española no es una fuerza represora. No venimos en pie de guerra", ha añadido. En una línea parecida se ha expresado Víctor Duque, secretario general de la Unión Federal de Policía, que ha asegurado que la Policía Nacional se quedará en la "retaguardia" y que se trata de un "dispositivo disuasorio", aunque no descartan que deban pasar "a la acción", dependiendo de "las circunstancias y la capacidad operativa de los Mossos". 

En la comparecencia, los cinco sindicatos, que representan el 90% del cuerpo, aseguran que los agentes están “en una situación socialmente tensa” debido a la “irresponsabilidad política de los partidos nacionalistas”. Las organizaciones policiales consideran que el proceso independentista, al que califican de “alocado” y “ajeno a la legalidad”, ha quebrado “el imperio de la Ley” y “el respeto a las normas” y defienden que se han trasladado a Cataluña “como instrumento de jueces y fiscales”. “Por ese, no por otro motivo, está aquí la Policía Nacional. No para perseguir ideas, urnas o papeletas, como afirman determinados líderes políticos”. Los sindicatos no han querido manifestarse el papel del Gobierno central en este conflicto porque, aseguran, no pueden hacer "valoraciones políticas".

Igualmente, el cuerpo estatal ha expresado su confianza en que los Mossos d'Esquadra "no van a apartarse estos días ni un milímetro de la legalidad", ni tampoco de las órdenes judiciales que reciban. Y han hecho un llamamiento a los responsables políticos de Mossos para que respeten el trabajo de los agentes autonómicos y "cesen ya en sus presiones a determinados mandos" para que sorteen las instrucciones de jueces y fiscales.

La Policía Nacional también lanza dos mensajes a los catalanes. A los no independentistas, a los que consideran “mayoría”, les dicen que “pueden tener la seguridad de que la legalidad no se va desmantelar en esta tierra. Y eso ocurrirá no por el imperio de la fuerza sino por la fuerza del Derecho”, añaden. A los soberanistas, “que se manifiestan y concentran, que hostigan a veces y persiguen” a los agentes, se quejan, los sindicatos advierten que no cederán “ante estas tácticas”.

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A preguntas de los periodistas y en referencia a episodios violentos por parte de manifestantes ultras, como la agresión a un joven independentista el pasado viernes, los sindicatos han condenado la violencia de "un y otro lado". Y asumen que pueden llegar grupos ultras de diferentes puntos de España de cara al 1 de octubre.

Sobre los gritos "¡A por ellos!", proferidos por manifestantes que despedían a los dispositivos que partían desde cuarteles de diferentes puntos de España hacia Cataluña, José Antonio Calleja, presidente del Sindicato Profesional de Policía ha asegurado que "no tienen ninguna lógica" y que no los apoyan. "Pero no podemos controlar manifestaciones espontáneas de la gente", ha añadido.

Condiciones "no idóneas"

Sobre las precarias condiciones en que se alojan los policías en los cruceros anclados en Barcelona y Tarragona, que fueron denunciadas por un agente a través de las redes sociales que posteriormente fue relevado, los sindicatos admiten que las condiciones de alojamiento "no son las más idóneas", pero las aceptan por la "situación de excepción".

También en relación a los barcos y a la polémica sobre las lonas tapando el dibujo de Piolín, Calleja ha reconocido que ha sido "objeto de mofa" por las redes sociales, pero ha querido quitarle hierro a la polémica. "Es una anécdota más. Tampoco lo entendimos cuando lo taparon. Los barcos hacen su función de alojamiento".

Los sindicatos han declinado cifrar el dispositivo enviado a Cataluña -no conocen la cifra, aseguran-, pero han defendido que el gran volumen de agentes no está dejando desprotegidos otros lugares de España porque los agentes están "doblando o triplicando" las jornadas. Las organizaciones han asegurado que el contingente estará en Cataluña 15 días "pase lo que pase" el 1 de octubre.

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