Mimos en el Nuncio
El legendario Café del Nuncio, en La Latina, acaba de reabrir sus puertas con una cuidada propuesta gastronómica
Sobre una enorme escalinata, en pleno barrio de La Latina, brillan una decena de mesas iluminadas por velas. Es la idílica terraza del recién inaugurado Café del Nuncio (calle de Segovia, 9; unos 25 euros por persona).
Aunque acaba de abrir, este local forma parte de la historia —casi de la leyenda— de Madrid. “Una de las primeras menciones sobre el Café data de 1877”, cuentan desde Deluz y Compañía, grupo cántabro de restauración sostenible de la familia Zamora, con Lucía y Carlos Zamora al frente, y que ya regenta en la capital La Vaquería Montañesa, Celso y Manolo, la Taberna La Carmencita y el Café Angélica.
En su concentrada carta no falta de nada. Arrancan con una buena selección de verduras; sirvan como ejemplos sus cuidados tomates rellenos —muy recomendables los que esconden anchoas con alcaparras— o cualquiera de sus “verduritas ecológicas de campeonato”. Continúan con salpicones veraniegos, como el cañí (con rape, mejillón y pulpo), o con una selección de chacinas. Y rematan con cualquiera de sus recetas legendarias, desde los tanquitos de ternera eco hasta el salmón salvaje poché. “Rescatamos recetas tradicionales de los grandes cafés europeos”, agregan los propietarios, que han respetado al máximo el local original, como evidencian la barra o el suelo, y lo han decorado con cuidadas piezas, algunas de los años treinta y cuarenta y otras de corte contemporáneo.
Moderna es también su propuesta de vinos, con ocho apartados (diferenciados por denominaciones o uvas) que recogen interesantes caldos para todo tipo de público. Además, ofrecen un interesante vino de barril. Y una selección de postres entre los que destaca la tarta de zanahoria.
"Históricamente, los cafés han sido un lugar de encuentro, donde se han difundido ideas y tendencias”, dicen desde Deluz, “ese es el espíritu del nuevo Café del Nuncio”.
En tres ideas
- Lo mejor... Su terraza al anochecer, la calidad de sus productos y el cuidado trato.
- Lo peor... Llegar y no tener sitio porque ya se haya corrido la voz.
- Ideal para ir con... Tu pareja para cenar a la luz de las velas; con unos amigos o con tu abuela para tomar algo en el Madrid de los Austrias.
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