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El Ayuntamiento municipaliza Línea Madrid

El nuevo pliego amplía servicios y plantea la creación de 240 nuevos funcionarios

El Ayuntamiento de Madrid presentó ayer las condiciones para la licitación del nuevo contrato de Línea Madrid, el programa de atención a la ciudadanía de la capital que cuenta con 52 millones de euros de dotación y que el año pasado, en el conjunto de canales que opera, gestionó 9,5 millones de servicios y concertó 1,2 millones de citas. Por otro lado, el Consistorio presentó un calendario para municipalizar las 23 oficinas de Atención a la Ciudadanía y que, a partir de 2019, sustituirá a los trabajadores actuales por funcionarios, convocando 240 nuevas plazas. El actual contrato de Línea Madrid termina en abril de 2018.

El texto nuevo amplía los servicios y establece para los trabajadores una serie de cláusulas sociales: mejorar la estabilidad de la plantilla y sus condiciones laborales. “Será mediante un plan progresivo y suave”, dijo Pablo Soto, concejal de Participación Ciudadana, Transparencia y Gobierno Abierto, que presentó ayer el pliego y que contempla aumentar un 50% más los puestos de trabajo por turno. Entre las condiciones que deberán cumplir las empresas aspirantes figura la ampliación de la atención a la ciudadanía a través de redes sociales y mensajería instantánea. También mejorar los salarios, la estabilidad del empleo, la conversión de contratos temporales en indefinidos o aumentar el perfil del personal contratado, que deberán ser de categoría superior a las actuales: concretamente, de gestores y supervisores, siguiendo el convenio del sector.

Refuerzo en transparencia

“Son requisitos que figuran como exigencia o darán puntuación a las firmas que se presenten”, apuntaron desde el Ayuntamiento, que valorará las ofertas primando la calidad del servicio y las cláusulas sociales frente a la oferta económica.

“Creemos que [este nuevo contrato] influye demasiado en el ámbito laboral y puede ser declarado ilegal”, dijo la concejal de Ciudadanos en el Ayuntamiento Silvia Saavedra. La edil sí que consideró positivo el denominado Pacto de Integridad: “Un novedoso mecanismo de rendición de cuentas que refuerza la transparencia”, en palabras del Ayuntamiento, y que es el resultado de un acuerdo alcanzado con la ONG Transparencia Internacional por el cual un experto independiente evaluará toda la contratación.

“Este gobierno apuesta por la gestión pública”, añadió Soto. Como ejemplo habló de BiciMad, el servicio de bicis públicas, que desde su municipalización, en noviembre de 2016, ha reducido de manera “espectacular” el número de reclamaciones. También citó la Funeraria, que, después de seis meses de su retorno a la gestión municipal “y en contra de lo que algunos temían”, ha aumentado un 6% sus ingresos.

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