La plantilla de Eulen amenaza con paralizar El Prat 24 horas

El conflicto entre la empresa de seguridad privada Eulen y sus trabajadores se encuentra en un punto muerto, y amenaza con alargar y agravar las largas colas que se han vivido en la última semana en los controles de seguridad del Aeropuerto de Barcelona-El Prat. Tras una segunda reunión de mediación fallida, el comité de huelga advirtió ayer de que, si Aena, a la que considera responsable del conflicto, no se sienta a la mesa, la huelga parcial del próximo viernes podría ser de 24 horas.

“Punto muerto”. Así definen la situación fuentes del comité de huelga de Eulen, la empresa de seguridad privada que desde hace algo más de un año gestiona los arcos de seguridad de las dos terminales del aeropuerto de El Prat. El motivo de este desencuentro es que las dos partes del conflicto no quieren moverse de su casilla de salida. Eulen, por un lado, considera que la convocatoria de la huelga no es legal, porque asegura que no toda la plantilla votó en la asamblea de la que salió la decisión. La denuncia de la empresa forzó ayer una reunión entre Eulen y el comité de huelga con la mediación de la Generalitat, en el Tribunal Laboral de Cataluña, un encuentro en el que no se avanzó hacia ninguna solución, y que se suma al del pasado viernes, cuando los trabajadores plantaron a la empresa y a la Generalitat porque Aena no estaba presente.

La posición de los representantes del comité de huelga, por su parte, sigue inamovible: no negociarán hasta que Aena, a la que consideran responsable del conflicto por haber adjudicado “a la baja” el contrato de los controles de seguridad a Eulen, se siente en la misma mesa. Aena declina esta responsabilidad: “Somos los primeros interesados en que se solucione el conflicto, pero no nos vamos a sentar a negociar por un problema entre una empresa privada y sus trabajadores”.

A causa de este desencuentro, desde el comité de huelga explicaron ayer que los trabajadores se plantean alargar la huelga anunciada a partir del próximo viernes. De momento, la convocatoria indica que la huelga consistirá en cuatro parones de una hora todos los viernes, domingos y lunes de agosto. Mañana, la plantilla decidirá en una asamblea si, en lugar de paros parciales, se harán huelgas de 24 horas.

A pesar de que las dos partes del conflicto están en evidente desacuerdo, hay indicios que muestran que se podría desencallar la situación: “Sabemos que la empresa tiene un acuerdo preparado con algunas mejoras, pero hasta que no negociemos con Aena no habrá solución”, explican fuentes conocedoras del conflicto.

De momento, este fin de semana Eulen ha incorporado empleados de refuerzo para evitar las colas de hasta dos horas que causaron indignación y malestar entre los pasajeros la semana pasada. En los últimos días, la empresa ha traído 25 trabajadores de otras comunidades autónomas, y se esperan 25 más. Esta ampliación de 50 personas en la plantilla es precisamente la principal reivindicación de los trabajadores, ya que consideran que la falta de personal es la causa de que no puedan hacer descansos o de que se les pida hacer horas extra hasta jornadas de 16 horas.