U2 llenará hoy el Estadi Olímpic, a los 30 años de ‘The Joshua tree’

El rock ya es un señor mayor, y como todo señor mayor tiene memoria. Vale la pena recordar, además, lo que afirmó un medio tan poco rockero como el Wall Street Journal, que dijo que la industria musical recurre a las viejas leyendas porque no ha logrado imponer nuevos recambios y remozar el mercado. Si el Pisuerga pasa por Valladolid no es de extrañar que U2 caigan en que su disco The Joshua Tree haya cumplido treinta primaveras, y dado que su última gira fue de recintos bajo techo, no se antoja mejor excusa para volver a los estadios donde los colocó este disco que celebrar su aniversario. Y esta tarde noche Barcelona vuelve a prestar su Estadi Olímpic a los cuatro irlandeses, menos airados y menos jóvenes, para que con todas las entradas vendidas lo toquen de cabo a rabo tal y como el envejecimiento industrial ha impuesto como última moda en los últimos años: o los grupos se vuelven a reunir, o hacen giras de presunta despedida o tocan sus discos paradigmáticos. El rock es un muy digno señor mayor con mucha memoria.

Pero los tiempos han cambiado en 30 años y nuestro mundo no es tan seguro y la reventa se ha sofisticado y digitalizado. Consecuencias: dado que la entrada es nominal se sugiere al público que se presente con tanta antelación, portando un documento oficial (DNI o pasaporte) que autentifique al portador, como paciencia.

Telonero Noel Gallagher

Por cierto, aquellos asistentes cuya entrada la haya comprado otra persona tendrán que entrar obligatoriamente con ella en el recinto, y si el titular de la compra no puede asistir, los acompañantes tampoco. Los horarios indican que las puertas se abrirán a las 17.00, que a las 19.45 actuará Noel Gallagher, sí el hermano talentoso de los Oasis, y que a las 21.30 iniciarán su actuación los irlandeses.

Por si no se desea empantanarse en los atascos que se prevén, hay tres líneas de autobuses que unirán plaza de Espanya con el estadio. La parada 1 facilitará acceso a gradas por puertas 3, 4, 5, 6 y Red Zone; la parada 2 acceso a gradas por puertas 1 y 2 y zona VIP y la 3 el acceso a pista, que se realizará a la altura de la plaza Europa, entre las piscinas Picornell y el INEFC. La tercera vía son las escaleras mecánicas y un paseo para ir conjeturando qué repertorio sacarán a relucir Bono y los suyos.

En casi toda la gira que llevan realizando, iniciada en mayo en los Estados Unidos y ya en Europa desde el pasado 12 de julio, han abierto con Sunday Bloody Sunday, New Year’s Day, Bad y Pride; es decir, tralla para demoler un estadio.

Luego tocan de una tacada y en orden The Joshua Tree, lo que supone que interpretan en directo por vez primera Red Hill Minnig Town, y más tarde es cuando el repertorio se abre a las variaciones. Suelen sonar Miss Sarajevo, una pieza que Bono cantó con Pavarotti en el álbum Passenger, Beautiful Day, Elevation, Vertigo y One, y se pueden incluir incluso versiones de Oasis como Don't Look Back In Anger.

Total, un disparo al centro de la diana escenificado ante una pantalla colosal de leds que devuelve a la banda a su lenguaje mastodóntico tras la muestra de recursos y talento escenográfico de su última gira bajo techo, Innocence & Exerience. Peces, en realidad ballenas, en el agua. U2 recordando el disco que hoy les permite ser los amos de los estadios. En Barcelona y como única visita a España, país en el que debutaron en Madrid precisamente con la gira de The Joshua Tree hace treinta años.