La Generalitat cuestiona la “credibilidad” de los comunes por el 1-O

La Generalitat se ha sumado este martes a las críticas a Catalunya en Comú por su ambigüedad con el referéndum de independencia, tal y como hicieron el pasado domingo varios dirigentes del secesionismo. "Yo me preguntaría sobre la credibilidad de un movimiento político que dice que las cosas se pueden transformar pero luego dice que nada de eso se puede hacer", ha asegurado Neus Munté, consejera de la Presidencia al finalizar la reunión semanal del Gobierno catalán. 

Munté ha destacado la importancia de "sumar el máximo de gente posible" para participar en el referéndum, pero no se ha privado de pedir un análisis de la "coherencia" de los comunes, por su posición. La dirección de Catalunya en Comú aprobó el pasado sábado apoyar el referéndum en tanto que una movilización más para reivindicar el derecho a decidir, pero no reconocer el carácter vinculante. 

"Les pedimos concreción en sus planteamientos y saber si mantendrán el posicionamiento que tuvo el alcalde Xavier Trias con el 9 de noviembre", ha dicho Munté, en referencia a la colaboración que prestó el Ayuntamiento de Barcelona con aquel proceso participativo de 2014. "En los últimos días han tenido mensajes que no son coherentes dentro del mismo movimiento político", ha añadido. 

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Por otra parte, Munté ha cuestionado también el posicionamiento del PSOE y del PSC de aprobar el próximo viernes en Barcelona propuestas concretas para desbloquear la situación catalana. La consejera ha asegurado que seguramente son "muy bien intencionadas", pero no se ha privado de recordar que el recurso de la Abogacía del Estado contra el Estatuto de Autonomía se presentó con José Luis Rodríguez Zapatero en La Moncloa. Asimismo ha recordado que, tras la sentencia del Tribunal Constitucional, el Gobierno del PSOE no hizo nada para recuperar las competencias laminadas a la Generalitat. 

La consejera de la Presidencia también se ha referido a la decisión del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) de rechazar la petición de archivo de la causa contra la consejera de Gobernación, Meritxell Borràs, por iniciar el proceso para la compra de urnas, aunque finalmente quedara desierto el concurso. Munté ha asegurado que la querella "no tiene ninguna base legal" y ha criticado que el gabinete de prensa del TSJC emplee un hashtag del caso Borràs, como ya hizo con el caso Forcadell para referirse a la causa que tiene abierta la presidenta del Parlament, Carme Forcadell.