Jazz en la ribera, bal folk en la sierra y Festimad

Tres importantes festivales acaparan la atención del finde. Festimad por un lado, que ya viene celebrándose desde la semana pasada. Esta vez acoge a un montón de bandas internacionales de enorme peso, como son los neoyorquinos The Fuzztones, los escoceses The Jesus and Mari Chain y los británicos The Imaculate Fools. De Australia vienen además Twelve Foot Ninja, y Rinôçerôse, de Francia. Y estas propuestas se alternan con las nacionales de Corizonas, Pájaro, Malandro, Bambikina o Viva Suecia!, entre otras muchas. En Aranjuez prosigue la segunda edición del Aranjazz con un tributo a Miles Davis a cargo de Milestones Ensemble además de las actuaciones de Janine Johnson Quartet y el Yoio Cuesta Dúo.

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Y en Valdemorillo por segundo año se celebra un nuevo Folkarria, que llega a su séptima edición convertido ya en el encuentro referencial de bal folk más importante del sur de Europa. Concurren grupos belgas como Les Bottines Artistiques y EmBrum; españoles como Acetre, y franceses como Bargainat, Ciac Boum, La Base Dúo, Hoctomoz o Bal Barbare. Durante tres días en la localidad serrana y en varios escenarios distintos se bailarán mazurcas, bourreés, valses, polkas, círculos circasianos, jotas, chapelloises, corridiños, fandango y toda esa suerte de danzas ibéricas y europeas que se encuadran dentro del movimiento bal folk. Hay también un apartado de concurso para grupos emergentes, además de talleres de baile, artesanía, construcción de instrumentos tradicionales y actividades para niños.

Fuera de estos tres encuentros, destaca la actuación de este viernes de Las Migas, el cuarteto femenino donde se dio a conocer Silvia Pérez Cruz. Sin ella, pero con Alba Carmona como cantante, han seguido cosechando éxitos y hoy presentan su nuevo disco, Vente conmigo, con artistas invitadas de lujo como la singular Rozalén. También la de Placebo mañana en el Wizink Center. El grupo británico de rock alternativo anda celebrando sus veinte años de carretera con el disco A place for us to dream, con el que llegan a Madrid.

Hay un ciclo de flamenco en el Galileo que arrancó anoche con el Capullo de Jerez, y sigue hoy con un artista consagrado como el cantaor Duquende. Se cierra mañana con un valor emergente, Antonio Lizana, un tipo que es capaz de cantar por soleares o bulerías alternado eso con la ejecución impecable de su saxo alto, todo para mayor gloria de una suerte nueva de flamenco que se mira en el jazz de ahora.

Aparece un nuevo cantautor en la sierra, lo cual no deja de ser emocionante. Se llama Balta Cano y mañana estrena su primer disco, Analogía Punta, que tiene la peculiaridad de haber contado para su grabación con artistas como Tony Marmota, Pez Mago, Montoto o Rozalén, todo un logro para una ópera prima.

El blues seco y ardiente del trío Guadalupe Plata sigue causando estragos. Úbeda no había aportado una propuesta tan carismática desde Joaquín Sabina. El trío le supera en misterio, aunque sea solo por la parte de insólita propuesta instrumental.