El teatro Arnau se podrá rehabilitar sin necesidad de derribarlo

No habrá que derribar el teatro Arnau, en el Paral.lel de Barcelona, y construirlo de nuevo, tal y como lamentó en octubre pasado el Ayuntamiento de Barcelona. Informes posteriores al primero que encargó el consistorio, que reveló el mal estado de la estructura del edificio, permiten pensar que pese a las deficiencias se podrán salvar partes de gran valor patrimonial de la construcción.

Lo han explicado este jueves ayer los concejales de Cultura, Jaume Collboni, y del distrito de Ciutat Vella, Gala Pin, que dieron cuenta a las entidades de las conclusiones del proceso participativo que el Ayuntamiento ha realizado para definir los usos del espacio. Fusionará una programación de artes escénicas (teatro infantil, música, danza y circo) con la preservación de la memoria (el propio edificio) y el trabajo comunitario (con la posibilidad de que las entidades participen en la gestión del equipamiento).

Collboni ha recordado que el Arnau es “el teatro de barraca por excelencia en nuestro Paral.lel, que es el Broadway catalán”. Los teatros de barraca utilizaban la estructura de un almacén para habilitarlo como espacio para albergar representaciones utilizando materiales simples. Su fin era reproducir teatros a la Italiana a bajo coste. El Arnau es de 1903, lleva 17 años cerrado y el Ayuntamiento lo compró en 2011, a finales del mandato del exalcalde Jordi Hereu (PSC).

Además de la dificultad de rehabilitar un edificio con graves deficiencias, Collboni y Pin han avisado de que por su ubicación las obras pueden hacer aflorar restos arqueológicos. Por ello no se atreven a poner fecha al fin de la obra. Pero sí al arranque: finales de 2018, cuando falte medio año para las elecciones. La idea es tener listo el concurso esta primavera y el presupuesto de la rehabilitación es de nueve millones de euros, ha dicho Collboni. “Una hipótesis generosa para no pillarnos los dedos”, dada la complejidad del proyecto, ha aclarado.

Obras y preservación de la memoria a parte, Gala Pin ha subrayado que el plan “recoge lo que han expresado las entidades y el entorno: entender las artes escénicas de forma pluridisciplinar, que no esté encorsetado en una sola disciplina; y tener en cuenta el arraigo comunitario”. Esto es, que sea un equipamiento municipal de ciudad pero con fuerte arraigo a los barrios del Raval, Sant Antoni y el Poble Sec.

Programación itinerante

El enfoque comunitario que plantearon recuerda al del Ateneu Popular de Nou Barris, que celebra 40 años de la ocupación por parte de los vecinos de lo que hoy es un espacio de referencia internacional por su programación y modelo de gestión asamblearia. Incluso recuerda al Ateneu la idea de que hasta que no estén listas las obras se ponga en marcha el Arnau Itinerante. Como durante las obras del Ateneu Popular, cuando la programación se dio vueltas por otros espacios de Barcelona. La previsión es que el Arnau Itinerante funcione entre dos y cuatro años y arranque la próxima temporada.