10 detenidos en una pelea entre dos familias por la custodia de un menor

Alrededor de la una y media de la tarde, el 091, el teléfono de emergencias de la Policía Nacional, recibió múltiples comunicaciones de que se estaba produciendo una pelea multitudinaria en la plaza del General Vara del Rey. Al lugar acudieron tres coches patrullas de la comisaría de Centro, a los que se sumaron otros cuatro de la Policía Municipal. Cuando llegaron, encontraron a un grupo numeroso de personas que se estaba pegando a patadas y puñetazos. Parte de los contendientes se habían desplazado hacia una zona comercial dedicado a las antigüedades en la calle de la Ribera de Curtidores.

Los agentes se dispersaron por la zona y lograron detener a diez personas, con edades entre los 26 y los 65 años. Iban fuertemente armados. La policía decomisó dos pulverizadores de autodefensa, dos machetes con hojas de 11 y 24 centímetros, tres navajas, unas tijeras, un bastón con un estoque de 77 centímetros, un bastón con un puño americano, dos estiletes, un cuchillo con 20 centímetros de hoja, dos pistolas simuladas y un chaleco antibalas. Parte de ellas las tiraron mientras eran perseguidos por los policías.

Silencio en comisaría

Los contendientes pertenecían a dos familias distintas. Una reside en el Pozo del Tío Raimundo (Puente de Vallecas) y la otra, en el distrito de Centro. Lo único que pudieron averiguar los funcionarios es que todos ellos habían quedado para dirimir la custodia de un menor. El resto está pendiente de ser esclarecido, porque todos se negaron a declarar en la comisaría de Centro, a donde fue conducidos tras ser detenidos, según fuentes policiales.

Ninguno de los arrestados necesitó asistencia médica. Tan solo recibieron golpes y sus ropas quedaron destrozadas. Nueve de los detenidos pasarán hoy a disposición judicial acusados de riña tumultuaria, mientras que el décimo quedó en libertad dado que sufre graves problemas de salud. Tan solo uno de ellos tenía antecedentes policiales. Todos tenían abogados particulares.