“Tenemos que explicar mejor nuestro compromiso con los trabajadores precarios”

Salvo una improbable sorpresa en el Congreso de abril, la secretaría general de CC OO de Cataluña recaerá sobre Javier Pacheco. Este extremeño, forjado en la lucha sindical en Nissan, milita hace 22 años en la organización que aspira a presidir. El pasado viernes reunió los avales necesarios para presentarse a un proceso en el que es el único candidato.

Pregunta. Ha recorrido Cataluña explicando qué quiere hacer cuando llegue a la secretaría general. ¿Qué ha visto?

Respuesta. Muchas expectativas respecto a una nueva manera de escoger la dirección del sindicato y conocer a los candidatos. Y también ganas de superar una etapa muy difícil para los trabajadores y de recuperar derechos perdidos.

P. Pero usted es el único candidato. ¿Qué debate ha habido?

R. CC OO lleva más de un año haciendo un ejercicio de autocrítica y reposicionamiento. Es el momento de pasar a la ofensiva para reclamar la parte que nos corresponde dentro de la recuperación económica. Tenemos la legitimidad como primera fuerza sindical en Cataluña, pero necesitábamos trabajar el consenso interno para ser más potentes. Mi candidatura es fruto de eso, no es una expresión casual. La cohesión interna es clave ahora.

Es el momento de reclamar lo que nos corresponde dentro de la recuperación”

P. ¿Se habla de la independencia en el territorio?

R. A la gente le preocupa la calidad del empleo, los recortes, la pobreza. Obviamente es un tema que no ha dejado de aparecer y es un anhelo de una parte importante de la ciudadanía. Es una preocupación y ocupación de la gente de CC OO pero en un plano que no es tan protagonista.

P. ¿Cómo llegar a trabajadores de empresas cada vez más pequeñas o de realidades diferentes como el teletrabajo?

R. El mundo del trabajo sufre una encrucijada muy compleja. Por un lado están los estadios de precarización que se han ido instalando fruto de las políticas neoliberales y por otro está el cambio sistémico con la transformación generada por la digitalización. Esto último cambia el modelo organizativo de los trabajadores en las empresas, pero sobre todo, el modelo de empresa. Si no tienen el centro de trabajo tradicional para organizarse, tenemos que recuperar la referencialidad y los locales territoriales de CC OO tienen que convertirse en el espacio para reencontarse y reconocerse con los compañeros.

P. ¿Cómo piensa abordar la lucha contra la precariedad?

R. No podemos darle carta de naturaleza. Que una sociedad asuma con normalidad que un tercio de sus miembros vive en condiciones precarias es el primer discurso al que hay que ganar la batalla. Eso pasa por dignificar el mundo del trabajo y para ello hay que mejorar la capacidad de organización de los trabajadores y derogar la reforma laboral. En CC OO tenemos que explicar mejor nuestro compromiso con los trabajadores precarios, los desempleados y visibilizar luchas para ganar derechos de las trabajadoras del hogar, por ejemplo.

La independencia es una ocupación del sindicato, pero en un plano que no es tan protagonista

P. Es muy crítico con la política industrial. ¿Qué hará?

R. Tenemos esperanzas en el Pacto Nacional por la Industria, que pone de manifiesto que no existía una política industrial. Hay retos como la redimensión del tamaño de las empresas. La formación es clave. Serán los mercados y otros factores los que diriman muchas cosas, pero tenemos que tener las bases sentadas en inversión en desarrollo e innovación. Nunca se ha creído en la Formación Profesional, que las élites catalanas han menospreciado.

P. Aboga por feminizar el sindicato. ¿Qué quiere decir?

R. CC OO, como la inmensa mayoría de organizaciones, funciona con un esquema patriarcal. Queremos transversalizar de manera real la definición de las funciones y las responsabilidades.

P. ¿Cómo lo concreta?

R. La dirección que presidiré tendrá más mujeres que hombres. Pero va más allá. En una sociedad donde las responsabilidades familiares están delegadas mayoritariamente en las mujeres, el sindicato tiene que dar ejemplo modificando sus horas y modelos de reuniones y de reparto de funciones para conciliar.

P. ¿A qué atribuye que no se haya aprobado aún la Renta Garantizada?

R. Falta de voluntad política. Es un incumplimeinto flagrante del Estatut. Hay una parte de la burguesía catalana representada en el Parlament que se resiste, a pesar de que están los recursos.

P. ¿Qué lo diferencia de Joan Carles Gallego?

R. Yo vengo del mundo de la industria, él del sector público. Eso genera una relación muy diferente con el trabajo. Yo entré al sindicato en 1995, cuando ya era una organización con recorrido, a él le tocó el movimiento que acabó en la organización de CC OO. Es hora de que una generación que no lo fundó se ponga enfrente.