La Generalitat da 8 millones a Montmeló y enoja a la CUP

El Gobierno catalán ha aprobado, en plena negociación presupuestaria, la ampliación de capital de Circuitos de Cataluña, entidad que gestiona el trazado y las instalaciones del circuito de Barcelona-Cataluña, más conocido como el de Montmeló (Vallès Oriental). La operación se concreta en la inyección de casi 8 millones de euros en el capital de la sociedad. Los grupos parlamentarios de la CUP y Catalunya Sí Que Es Pot (CSQP) se han opuesto a la medida y han apostado por cerrar el circuito.

La decisión ha enojado a la CUP que, en el debate de Política General, ya afeó al Ejecutivo que inyectara 21 millones de euros anuales en el circuito cuando podría dedicar esa suma a otras áreas sociales. La diputada Mireia Boya ha criticado esta tarde el "postureo del Govern con el cambio climático" y ha defendido la clausura de la instalación. "Las supuestas ganancias al territorio no compensan la inversión que tiene que hacer la Generalitat porque dos días al año haya una competición deportiva", ha constatado. En el debate de Política General, Benet Salellas consideró desproporcionado el gasto para una instalación que es deficitaria desde 2009 y que solo está abierta dos días al año.

La operación del Gobierno se enmarca en el proyecto ya iniciado en 2015 que trata de garantizar la estabilidad financiera de la sociedad que gestiona el circuito y evitar las pérdidas. En el último tramo del gobierno de Artur Mas, el Ejecutivo catalán acordó inyectar 10 millones de euros en el plazo de dos años (2,5 millones el año pasado y los 7,5 restantes, este año). 

A las críticas se ha sumado la diputado Hortènsia Grau (CSQP) y ha insistido en la necesidad de clausurar las instalaciones en Montmeló. "No podemos estar haciendo una ley de cambio climático pero al mismo tiempo no hacer todo lo que tenemos en nuestras manos porque sería hipócrita", ha constatado.

La apuesta del Gobierno de Carles Puigdemont contrasta con la actuación del equipo de Ada Colau en el Ayuntamiento de Barcelona. Barcelona en Comú (BC) ya aseguró durante su campaña electoral para las municipales que subvencionar la Fórmula 1 no era "la prioridad" y, una vez en el gobierno, anunció una retirada progresiva de su apoyo económico al circuito. El pasado gobierno de Xavier Trias firmó en 2012 un acuerdo de patrocinio con el trazado de Montmeló, que suponía un desembolso de cuatro millones de euros anuales para las arcas municipales. Este año, el consistorio de Colau ha abonado dos millones de euros, la mitad que en 2015.