Los alumnos de la Complutense se movilizan contra la reforma

La decisión del rector de la Universidad Complutense, Carlos Andradas, de eliminar nueve facultades y más de 100 departamentos ha soliviantado a los centros afectados y algunos empiezan a movilizarse. Un centenar de estudiantes y docentes de Trabajo Social, que irán a Políticas y Sociología, se han concentrado en la plaza de Callao.

Esta mañana los alumnos han recibido el apoyo del Sindicato de Estudiantes. Este ha cargado en un comunicado contra el rector y han advertido de que no permitirán convertir la universidad en "un coto privado para las élites" con movilizaciones si no se retira su propuesta.

La idea de remodelar la Complutense no es nueva. Cuando a mediados de los años ochenta se crearon departamentos hechos a la medida de los más afamados catedráticos, los profesores sin plaza fija se revolvieron, sin suerte. El predecesor de Andradas, José Carrillo, se planteó la reforma en 2011, pero los problemas de la Complutense eran tantos —bajada de becas, tijeretazo al presupuesto, pérdida de 500 profesores y casi 400 miembros de personal de Administración y Servicios— que lo fue posponiendo.

En 2014, UGT lanzó una propuesta en el mismo sentido que la de Andradas. Ahora el sindicato reclama en un manifiesto que el rector tenga en cuenta el número de alumnos y las horas de clase que estos reciben con profesores de los departamentos. Temen que algunos de ellos estén sobredimensionados y funcionen mal. CC OO, por su parte, cree que el plan “no presenta unos criterios claros ni unas líneas de actuación ni un calendario creíble ni una memoria económica”

Un total de 35 de los 185 departamentos no llegan a los 12 alumnos que obliga la norma. Juan Tejada, vicerrector de Planificación y Evaluación Institucional, entiende que deben desaparecer, pues además crean un ambiente muy cerrado. “No somos un equipo de fútbol, pero en la vida hay competencia”.

Se fusionarán también los departamentos de la misma área de conocimiento. “No puede haber tres de Estadística repartidos entre las facultades de Matemáticas, Económicas y Estadística”, opina Tejada. De esta forma, los 60 que comparten saberes menguarán a 21.

El Colegio de Enfermeros cree que enmarcarse dentro de la Facultad de Ciencias de la Salud relega a su profesión a “un injusto” segundo plano, violando así “el principio de igualdad entre disciplinas que tienen una misma categoría formativa, la de estudios universitarios; y resta visibilidad a una actividad sanitaria que solo en nuestra región supera los 47.000 colegiados”.

Ahora el plan será presentado a los agentes sociales y al claustro. El 1 de julio se abrirá el periodo de alegaciones, que se prolongará hasta el 30 de septiembre, cuando se dará a conocer una segunda versión.