Bacardí inicia una huelga contra la deslocalización de la fábrica a Italia
La plantilla protesta contra el despido de 82 empleados
Los trabajadores de la planta de Bacardí en Mollet del Vallès han comenzado este martes una huelga indefinida para protestar contra la deslocalización de la producción a Italia. La multinacional ha iniciado un proceso de reestructuración que, en España, incluye el traslado de la unidad productiva que tiene en la localidad catalana desde 1968 y el despido de los 82 empleados que trabajan en ella. Aunque el resto de servicios —logística, atención al cliente, márquetin, etc.—, que emplean a otras 260 personas, se mantendrán, según la compañía.
El seguimiento del paro es del 100%, según el sindicato UGT, ya que está siendo acatado incluso por los trabajadores que no están afectados por el expediente de regulación de empleo (ERE). Fuentes del comité de empresa han explicado que esta mañana solo han entrado a las instalaciones algunos directivos. El motivo es el temor de la plantilla a un "cierre en dos fases". Sospechan que la retirada de la producción restará peso a la sede y que, dentro de unos años, sus funciones también serán deslocalizadas.
El ERE fue presentado la semana pasada pero la firma aún no ha propuesto indemnizaciones. Bacardí alega que "ha analizado todas las alternativas" pero que la fábrica de Mollet del Vallès "ha descendido a un nivel especialmente bajo" y que, al cierre de 2015, producía al 35% de su capacidad. El comité de empresa ha admitido que el centro, donde se elabora ron Bacardí y Martini, produce "un millón y medio de cajas menos que en su mejor época", pero ha defendido que la planta "nunca ha superado el 45% de su capacidad porque siempre ha estado sobredimensionada".
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