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El megalitismo catalán pasa a “primera división”

El Museo Arqueológico muestra las nuevas teorías sobre estos monumentos

El menhir de Mollet, localizado en 2009, en su ubicación actual.
El menhir de Mollet, localizado en 2009, en su ubicación actual.

“En la última década el megalitismo ha evolucionado mucho en Cataluña, pasando de ser un megalitismo pequeño y residual a un megalitismo de primera división”, asegura Rafel Sospedra, investigador del grupo Didàctica i Patrimoni (DidPatri) de la Universidad de Barcelona (UB) que ha organizado la exposición Quan les pedres ens parlen. Megalitisme a Catalunya, que puede verse en el Museo Arqueológico de Cataluña.

“La investigación nos ha dado muchas sorpresas. Lo que pensábamos sobre el megalitismo ha cambiado por completo. Lo ha hecho porque pensábamos que aquí teníamos un nivel menor de construcciones en comparación con otros países europeos, como el Reino Unido, y no es así”, señala el científico. Los demuestran hallazgos recientes como el del que sería el primer poblado neolítico de Cataluña, con una antigüedad de 6.000 años, localizado en Canovelles, que comienza a estar considerado como uno de los más importantes de Cataluña. El hallazgo, que tuvo lugar en enero, cuando se comenzaba a construir una escuela, ha obligado, según Sospedra, a reconsiderar todo el tema del megalitismo. En los últimos años se han encontrado en diferentes comarcas catalanas varios ejemplares de estelas antropomorfas y menhires, como el megalito de Reguers de Seró en Lleida o el menhir del Pla de les Pruneres en Mollet del Vallès. Se trata de unos monumentos característicos de la época neolítica y calcolítica en todo el continente europeo, con una datación de 5.300 y 4.200 años de antigüedad.

La exposición de megalitismo es, tras Neandertales en Cataluña, la segunda exposición “itinerante y de bolsillo”, como explica Sospedra, del grupo de investigación DidPatri. La tercera es Temps de Pólvora, que se inauguró el 11 de febrero en el Museo Municipal Castell de Rubí. Sospedra explica que este tipo de muestras más reducidas, buscan dinamizar la actividad de los museos, que están pasando por una situación muy crítica. “El año pasado tuvimos la idea de hacer exposiciones de bolsillo y gratuitas para el museo receptor, que solo tenía que hacer frente al transporte y al montaje de la exhibición”, aclara Sospedra.

El interés del público por el megalitismo, según el investigador catalán, podría darse debido al misterio que envuelve estas construcciones prehistóricas. “Son grandes construcciones y todavía no hemos podido descifrar la mayoría de signos que hemos localizado y, en muchos aspectos, sabemos poco sobre este periodo histórico”, admite Sospedra. La muestra, después del 28 de marzo, viajará al Museo de Sant Boi de Llobregat y al Museo del Suro de Palafrugell.

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