El ‘Govern’ admite que no puede hacer diplomacia de Estado
La Generalitat no modificará el nombre del Departamento de Exteriores por la suspensión del Tribunal
La Generalitat no cambiará su actuación en el exterior por la suspensión de las competencias en esa área dictaminada por el Tribunal Constitucional. Sin embargo, el Gobierno catalán es consciente de que sus atribuciones legales son limitadas: lo dejó claro el consejero de Exteriores, Raül Romeva, en una entrevista en TV-3. "La Constitución reconoce una serie de competencias exclusivas a los Estados, como firmar tratados internacionales. Y es evidente que no somos un Estado, no podemos hacer las cosas que hacen los Estados", lamentó Romeva.
Los servicios jurídicos del Govern están estudiando a fondo la suspensión para ver qué margen de maniobra tiene Romeva para actuar sin saltarse la ley. "Ni siquiera el recurso deja claro qué atribuciones están recurridas", aseguró el consejero. La Generalitat ha descartado cambiar de nombre el Departamento, una de las opciones que se barajaba: "No vamos a poner tippex en la tarjeta de visita de Romeva para que no figure acción exterior", ilustró en la emisora RAC-1 el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont.
“Están suspendiendo una tarjeta de visita. Les molesta que en la versión inglesa a Romeva se le llame ministro. Es un debate casi de diccionario”
Pese a admitir la limitación de sus competencias, Romeva tiene como prioridad explicar el proceso de independencia a la comunidad internacional. De momento, está concentrado en crear la estructura del departamento, aunque ya planea viajes para enviar su mensaje. Todavía no tiene fecha ni está claro el orden, pero los primeros destinos serán Bruselas, París y Londres. “Quiero poder explicar a los diferentes líderes de la UE cuál es el proyecto”, dijo Romeva, que ha enviado una carta a varios dirigentes internacionales con los planes de la Generalitat. En estas misivas, el alto cargo se presenta como minister, una denominación que generó suspicacias en PP y Ciutadans.
“Es la traducción en inglés de consejero, y se hace desde los años 90, no es mérito mío. Si ahora es un problema es porque el Gobierno tiene el mandato de construir un nuevo Estado”, se justificó. Puigdemont ironizó sobre las quejas recibidas: “Están suspendiendo una tarjeta de visita. Les molesta que en la versión inglesa a Romeva se le llame ministro. Es un debate casi de diccionario”.
El Gobierno catalán se escuda en las atribuciones en exteriores fijadas por el Estatuto y en los decretos que no han sido impugnados para mantener la actividad del Departamento de Exteriores. La cartera, de nueva creación, asume las mismas competencias que tenía en anteriores legislaturas una secretaría general, de rango inferior. El presidente apuntó que buscarán sortear la sentencia para que Romeva siga con su labor: “No dejaremos de hacer acción exterior y de tener relaciones internacionales. Buscaremos la manera de continuar haciéndolo”, aseveró.
Es la estrategia que, de momento, tiene la Generalitat ante cualquier decisión del Tribunal Constitucional, buscando el mecanismo para seguir con los pasos hacia la independencia, pero evitando el choque frontal con el Gobierno: “Nosotros vamos haciendo, y no nos pararemos. Buscaremos siempre la manera más inteligente, más práctica, y más efectiva de continuar adelante", prometió Puigdemont, que insistió en que la Generalitat lleva tiempo ejerciendo acción exterior. “El decreto de creación de la secretaría es literalmente el mismo que el que fija las competencias del Departamento, ampliado con otros temas que no han sido recurridos. Si entonces no hubo inconstitucionalidad, si ahora la hay nos lo tendrán que explicar muy bien".
El PP, vigilante
El líder del PP catalán, Xavier García Albiol, lanzó un aviso al Govern: si se salta la suspensión del Constitucional, lo denunciará: “No nos quedaremos de brazos cruzados”, apuntó, antes de añadir: “Si el presidente decide saltarse a la bartola las resoluciones de la justicia, vamos mal”.
El PSC y Ciutadans insistieron en diferenciar la acción exterior —destinada a la promoción económica, cultural o la cooperación internacional— de la política exterior, que la Generalitat quiere utilizar para recabar apoyos para la independencia.
Los socialistas reprocharon al PP que solo se interese "en generar conflicto", en palabras de la diputada Eva granados, mientras que el portavoz de C’s, Carlos Carrizosa, dirigió sus críticas a Romeva, acusándole de querer abarcar más atribuciones de las que le reserva el Estatuto.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.