El PP evita hacer autocrítica tras perder 6 de 11 diputados en Cataluña

Para la presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, el resultado de su partido, que pasó este domingo de once a cinco diputados es "digno". La líder popular cree que ha obtenido la horquilla más alta de los vaticinios de las encuestas —que siempre les otorgaban entre tres y cinco—, y se conforma con el hecho de que su gran competidor, Ciudadanos, haya obtenido un resultado muy inferior al que se esperaba. Los populares han celebrado este lunes un comité ejecutivo del partido para valorar los resultados del 20-D, del que extraen como conclusión que la lista más votada, es decir, la suya a nivel nacional, puede formar Gobierno.

"Hemos recuperado parte de nuestro voto", ha dicho Sánchez-Camacho. En realidad, los populares vuelven a su posición de partido minoritario en Cataluña siendo el último con representación en el Congreso. Ciudadanos ha sacado cinco escaños, uno menos de lo que ha perdido el PP, pero no les ha hecho desaparecer del mapa. Solo con el hecho de que el partido de Rivera haya sido la quinta lista, después de quedar segunda en las autonómicas del 27-S, el PP ya respira tranquilo.

"Se creía que Ciudadanos iba a arrasar en Cataluña y al final en otros sitios, como Andalucía, han tenido más éxito que aquí", ha explicado la todavía líder. Los conservadores achacan la caída en votos al desgaste por gobernar en Madrid, pero creen que Rajoy debe intentar formar un Ejecutivo en minoría y por eso, Sánchez-Camacho ha pedido "responsabilidad" al PSOE.

Otro logro para el partido, según su presidenta, es haber sacado los mismos escaños por Barcelona que la lista de Artur Mas —cuatro—. "Los independentistas no superan en votos ni escaños", ha añadido. Además, el PP se alinea con la CUP y cree que con estos resultados, el presidente en funciones de la Generalitat está en menos condiciones de conseguir un Gobierno y debe dejar paso a otro dirigente de Junts pel Sí.

En las listas del PP catalán se han quedado fuera de las expectativas dos figuras importantes: María Ángeles Esteller, diputada histórica y Manu Reyes, el exalcalde de Castelldefels (Barcelona) que perdió el Ayuntamiento tras un pacto de izquierdas. A pesar del sabor agridulce, el partido no se plantea acelerar los tiempos para relegar sus cargos internos. Sánchez-Camacho va como diputada a Madrid pero seguirá dirigiendo el partido hasta el congreso que tienen previsto para abril, después del congreso del partido a nivel nacional, en el que el actual presidente del grupo en el Parlament, Xavier Garcia Albiol, le sucederá si no cambia el guion previsto.