Colau desbloquea junto a ERC la línea 10 del metro hasta Zona Franca
El Ayuntamiento garantizaría la inversión para que la Generalitat acabe la obra
Para el próximo año estaba asegurada la inauguración del tramo de la línea 9 entre Diagonal y el aeropuerto de El Prat, uno de los compromisos adquiridos con los organizadores del Mobile World Congress. Pero el Ayuntamiento de Barcelona podría garantizar también que otro tramo de la línea 10 se inaugure en 2016 para que el suburbano llegue hasta la zona de Zona Franca, tal y como reivindicaban las asociaciones de vecinos.
Barcelona en Comú y ERC han alcanzado un acuerdo en el que se incluye la financiación, por parte del Ayuntamiento, de las obras necesarias para concluir la estación de metro de Motors. La Generalitat podría emprender las obras y posteriormente tendría que devolver los recursos al Consistorio, tal y como ha sucedido con otras obras de titularidad autonómica.
El presidente del grupo municipal de ERC en Barcelona, Alfred Bosch, enmarcó la promesa de inaugurar la estación que dará servicio al barrio de La Marina del Prat Vermell en el acuerdo de un paquete de inversiones alcanzado con el gobierno de Colau. El jefe de filas de ERC cifró en “entre 30 y 40 millones” el coste de la apertura: “Es una cifra abultada, pero no se escapa de las posibilidades de un ayuntamiento que cierra con mucho superávit”, dijo. Sobre la actitud de su grupo al negociar inversiones concretas dentro del plan para gastar los 96 millones de superávit este año afirmó: “Cuando podemos apretar, lo hacemos”.
El ramal de la línea 10 del metro estaba aparcado por las dificultades financieras por las que atraviesa la Generalitat, que había priorizado la conexión a las dos terminales aeroportuarias. Curiosamente ese ramal se deberá utilizar igualmente, porque en él se encuentran una zona de mantenimiento de trenes de la L9-L10.
Está previsto que la línea 9 del metro que unirá Diagonal con el aeropuerto de El Prat --recorriendo una quincena de estaciones, entre ellas Fira de Barcelona-- se ponga en marcha el próximo mes de febrero. La Autoridad del Transporte Metropolitano (ATM) ha cifrado en 10,8 millones de euros el coste de explotación de ese tramo de 20 kilómetros, casi tan largo como el de toda la línea 1. Al menos esa es la cantidad que se incluyó en el contrato-programa que se firmó con las diferentes entidades que aglutinan la ATM y la banca y que tendrá que desembolsar la Generalitat, como titular del servicio.
A ese coste de explotación que permitirá unir por primera vez en metro el aeropuerto con la capital catalana se le tienen que añadir el de las estaciones, que están concesionadas a las constructoras. El presupuesto anual de la ATM, el gestor del transporte público de la región metropolitana es de unos 1.100 millones de euros.
El próximo mes de diciembre, la ATM decidirá las nuevas tarifas que se aplicarán el próximo año. Según ha explicado el vicepresidente del AMB, Antoni Poveda, no se ha planteado todavía qué se aprobará, después que el año pasado, justo antes de las elecciones, se produjo un acuerdo entre CiU y el PSC para abaratar la T-10, el título más popular, y algún otro abono.
El uso del transporte público creció un 2,4% en los nueve primeros meses del año, al acumular 483,6 millones de viajeros, según los datos del Área Metropolitana de Barcelona (AMB). Las líneas del metro son las que mayor movilidad generan, 284,69 millones de viajes, lo que supuso una mejora del 2,7%. Los autobuses de Transports Metropolitans de Barcelona crecieron por debajo de la media, un 1%, hasta los 137,59 millones de pasajeros. Poveda ha destacado el fuerte incremento de los buses de gestión indirecta, que han crecido un 4,3%, transportando a más de 61,39 millones de viajeros hasta el mes de septiembre.
Los resultados se explican por la mejora de la situación económica y por el refuerzo en las líneas realizado por TMB, especialmente en 37 líneas de autobús, aprovechando la introducción de nuevos servicios complementarios a la red ortogonal de TMB.
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