Metro dejó sin personal hasta 58 estaciones en julio

El verano añade nuevos factores a la lista de problemas que afectan la red de Metro de Madrid. A las largas esperas y a las altas temperaturas en algunos andenes y vestíbulos durante la ola de calor que en las últimas semanas ha sufrido la capital, se suma también la falta de personal. Según los cálculos de CC OO, a lo largo de julio se quedaron vacías y sin ningún tipo de asistencia para los viajeros hasta 58 estaciones en un solo día. La insuficiencia de la plantilla se tradujo también en una reducción del número de trenes, con picos de casi el 30% en un día.

El sindicato ha recogido la distribución del personal a lo largo de este mes en tres franjas horarias: por la mañana, por la tarde y a partir de las 22.00. Según los datos, en lo que va de julio hubo 17 días en los que al menos 14 estaciones se quedaron sin personal. El pico se alcanzó entre las 22.00 y el cierre del servicio del pasado 3 de julio, cuando fueron 58 las paradas que se quedaron sin trabajadores.

Las estaciones del suburbano cuentan con un total de 294 puestos a cubrir: 202 a cargos de supervisores comerciales o jefes de vestíbulos, que pueden gestionar más de una estación; y 92 taquillas, de las que se ocupan los jefes de vestíbulo. “Tener una estación vacía implica la falta total de asistencia para los usuarios más ancianos, aún más grave durante el verano. Y supone también la ausencia de cualquier tipo de servicio ante las incidencias que puedan ocurrir, como por ejemplo la avería de una máquina emisora de billetes”, explica Ignacio Arribas, secretario General CC OO de Metro. “Hubo casos en los que los usuarios tuvieron que llamar por el interfono a un empleado que en aquel momento se hallaba en otra estación. Las esperas que han llegado hasta los 45 minutos”, insiste.

La falta de personal constituye también el motivo de la disminución del número de trenes en servicio, cuyo pico se alcanzó el pasado 17 de julio: a las 14.00 circulaban 66 trenes menos —un 28,33%— respecto a los previstos en las tablas que establecen la distribución de los convoyes por la red. “Las líneas 1,3,5 y 6 son las más afectadas por la disminución del servicio. A partir de las 22.00, además, los trenes salen según horarios que puntualmente no se cumplen”, remacha Arribas.

CC OO ha denunciado también que, pese a las obras de mejora que Metro está acometiendo en las líneas 6, 10 y 12 por segundo año consecutivo, en algunos tramos de ellas el posible hundimiento del firme conlleva el peligro de descarrilamiento de los convoyes. El aumento del desgaste de las líneas implica además un incremento de los gastos de mantenimiento.

Fuentes de la Consejería de Transporte de la Comunidad de Madrid minimizan los datos elaborados por el sindicato. Aclaran que las tablas de circulación  no se han respetado solo en “algún momento puntual” y que la empresa “está tratando de subsanar” esos fallos. Subrayan además que “todas las paradas están comunicadas entre sí con interfonos. Puede que en algún momento haya estaciones que se queden sin personal, pero es algo puntual debido a que los mismos trabajadores atienden a más de una estación a la vez”.