El nuevo nombre de la plaza genera debate en Vázquez de Mella

Un corrillo de cuatro mujeres discute en Vázquez de Mella (Chueca) sobre el cambio de nombre de la plaza. Son vecinas del barrio de toda la vida y llevan casi un mes -desde que se dio a conocer que esta plaza podía pasar a denominarse Pedro Zerolo, después de la muerte del socialista- debatiendo sobre las consecuencias que iba a tener este cambio. "A mí me parece muy mal. ¿Quién es este señor para venir a cambiarnos la plaza? Todos mis respestos porque sea gay, pero no es nadie para que pongan su nombre aquí", argumenta María Pérez, de 73 años, que vive "desde siempre" en la calle de Hortaleza. Su amiga Candela Muñoz, de 54, está de acuerdo: "No veo lógico que lo cambien, que le pongan una calle en otro sitio, ya vale de cambios aquí". Este nueva denominación de la plaza sería la cuarta en los dos últimos siglos: plaza de Bilbao, de Ruiz Zorrilla y plaza de Vázquez de Mella. 

La Asociación de Vecinos de Chueca ha pedido hoy al Ayuntamiento un proceso de consulta para conocer la opinión de los residentes sobre este cambio. En una nota, la asociación ha explicado que planteó al PSOE la posibilidad de poner el nombre del concejal socialista fallecido, impulsor de la ley de matrimonio homosexual, "a la plazuela situada en la calle de San Gregorio" sin tener que "retirar" ningún nombre de calle o plaza del barrio. Así, reiteran que no comparten que el PSOE haya promovido una iniciativa "para quitar el nombre de un personaje histórico de la ciudad a una plaza (Vázquez de Mella) y dárselo a un concejal suyo (Pedro Zerolo)".

Cuando Pilar Dugenest, de 21 años, baja al portal acompañada de su abuela, ésta -que lleva más de 60 años viviendo en la plaza Vázquez de Mella- no puede evitar exclamar "¿Ya lo han cambiado? ¡Menudos sinvergüenzas!". Su nieta comparte la opinión de la anciana, ya que cree que hay cosas más importantes en el país ahora mismo que gastarse el dinero en un simple cambio de nombre.

A pocos metros de allí, Toni Ocaña, de 31 años, espera para entrar en el centro social Vázquez de Mella. "Ahora tendrán que cambiarle el nombre, sino no tendría sentido", se ríe. Le parece bien la medida, porque cree que Zerolo fue un buen político. De su misma opinión es Virginia Becerril, una joven documentalista que trabaja cerca de la plaza y descansa allí todas las mañanas: "Me parece bien este homenaje a un político que hizo mucho por la comunidad gay".

El debate de los vecinos se repite también dentro de los establecimientos. Las opiniones varían tanto entre comercios como en el interior de ellos. En la zapatería Rebeca Sander, una de las empleadas asegura que le parece muy bien porque "va a traer a mucha más gente, porque a Vázquez de Mella no lo conocía nadie". Sin embargo, su compañera Tatiana Gofman lo ve como un claro error: "Estoy en contra de estos cambios, porque me parece quitar una parte de la historia de España y me da pena que se destruya la leyenda anterior. Si se llamaba Vázquez de Mella, por algo sería. Entiendo que esto es un barrio gay, pero no se puede nombrar todas las calles por personas gays. Me parece que había otros sitios para poner el nombre de este señor". Si en algo están de acuerdo ambas es en el "dineral" que va a costar esta medida al Ayuntamiento.

Además de la inversión que va a tener que hacer el Consistorio -todavía no se han dado cifras-, algunos comerciantes recuerdan el propio desembolso que van a tener que hacer ellos. "Nosotros tenemos un stock de documentos, entre carteles, tarjetas y demás, de alrededor de 2.000 euros que ahora vamos a tener que cambiar. Estaría bien que nos ayudaran con esta financiación", estima Dolores Montero, socia del Espacio Eco Serendipia.

No todos los establecimientos tienen este inconveniente ya que aunque sus puertas dan a la plaza, la localización oficial se encuentra en otras calles. Es el caso de Cupid Killer Boutique, una tienda que dirige Fernando Sanchis: "Yo me ahorro ese problema porque ya pertenezco a la calle Infanta". Para este comerciante se trata de una buena medida, tanto porque puede atraer a más gente como porque "está bien que las plazas tengan nombres de gente más actual que la gente pueda identificar".

"¿Quién era Vázquez de Mella?", esa pregunta se ha convertido este miércoles en una cuestión habitual en el debate sobre el nuevo nombre de la plaza. Los comerciantes y vecinos ubican a Pedro Zerolo, pero dudan sobre esta figura más histórica. "Un filósofo, escritor y político español, ideólogo del carlismo", se contesta una empleada del gimnasio BodyVip después de buscarlo en Internet, "No podemos valorar bien sin saber exactamente quién era".