Colau quiere rebajar el sueldo de los jefes de la oposición 22.200 euros

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha dejado claro que cobrará un máximo de 2.200 euros mensuales, como lo otros 10 concejales de Barcelona en Comú. Así lo fija el Código Ético de la formación. El gobierno municipal no puede bajar el sueldo del resto del plenario: 30 concejales de seis partidos. Pero sí se dispone a rebajar lo que cobran los portavoces de los grupos municipales (y portavoces adjuntos), sus presidentes y vicepresidentes, y los concejales que presidan una comisión de plenario. La rebaja es de hasta 22.200 euros anuales.

La rebaja propuesta por el ejecutivo municipal oscila entre un 24% y un 15% menos de salario bruto el año. El sueldo de la alcaldesa se rebajaría de 109.000 euros a 80.115 (un 27%) y el de los tenientes de alcalde, portavoz del gobierno y presidentes de los grupos municipales, un 24% (de 98.192 a 75.019 euros los dos primeros; y de 92.600 a 70.376 euros los presidentes).

Los regidores del Gobierno y portavoces de los grupos verían reducido el sueldo un 20% (de 84.532 a 67.626 euros) y los presidentes de comisiones de plenario o de distritos, un 15% (de 75.316 a 64.019 euros). La rebaja de los portavoces adjuntos de los grupos municipales sería del 17% (de 76.649 euros a 64.002).

El ejecutivo de Colau defiende que las retribuciones que proponen son "razonables, sin privilegios, comenzando por la alcaldesa y con reducciones graduales hasta los presidentes de los consejos de distrito", según un portavoz.

Todo esto se tiene que debatir en el plenario del cartapacio del próximo martes, en el que se fijará el esqueleto de la organización del Ayuntamiento de Barcelona. Una negociación vinculada a otros aspectos, como los sueldos de los electos, el listado de los 92 cargos de confianza, quién presidirá las cuatro comisiones de plenario, los distritos o la representación del plenario en los consejos de administración de las empresas municipales.

En el caso concreto de la alcaldesa y los regidores de Barcelona en Comú, sea el que sea el límite salarial que fije el cartipacio, mantienen que su salario será de 2.200 euros. Lo que todavía no responde la formación es qué fórmula empleará para rebajar los sueldos ni a qué destinará la diferencia.

Los grupos municipales de CiU, PSC, PP y Ciutadans declinaron ayer valorar la rebaja salarial de la oposición que propone el ejecutivo de Colau a la espera de la reunión prevista para hoy entre todos los grupos. El PP defiende que el sueldo de los concejales se equipare al de los diputados del Parlamento catalán, una cifra difícil de establecer porque al salario base (37.300 euros anuales) se añaden complementos por portavocías, presidencias, participar en comisiones, además de cuantiosas dietas.

La postura de ERC respecto a las retribuciones es la de proponer un código ético aplicable a electos y también a gerencias y direcciones. Proponen "un debate amplio, sereno y sin demagogia que incluya salarios, renuncia a dietas complementarias y contrataciones de familiares de los electos". En cualquier caso, fuentes del partido republicano recuerdan que son partidarios de que la alcaldesa sea quien más cobre y subrayan que cuando su líder, Oriol Junqueras, se convirtió en alcalde de Sant Vicenç dels Horts se rebajó el sueldo un 40%.

Las reuniones entre los seis grupos del Ayuntamiento (BComú, CiU, ERC, Ciutadans, PSC y PP;  la CUP se mantiene al margen de la discusión) continuaron durante la jornada de ayer, en vísperas a la Junta de Portavoces prevista para este jueves por la mañana.

El miércoles, los grupos acercaron posturas en el capítulo referente a los 92 asesores que nombra el Gobierno. De un reparto que días atrás había quedado en 58 para el ejecutivo y 34 para la oposición se pasó esta semana a 52 para el equipo de Colau y 40 para el resto de grupos (12 para CiU, siete para ERC, siete para Ciutadans, seis para el PSC, cuatro para el PP y cuatro para la CUP). La CUP, por cierto, tiene intención de designar a las personas que ocuparán el puesto de asesor en un proceso de concurso interno dentro de la formación.

Barcelona en Comú también cedió en el capítulo de las direcciones de las empresas municipales. Inicialmente pretendía rebajar el peso de la oposición en los consejos de administración, pero durante las negociaciones ha aceptado que reflejen el equilibrio de fuerzas del plenario. Sobre los distritos, BComú propone repartir las presidencias entre los grupos (dos para partido y una para CUP y otra para el PP).

En lo que no ha cedido Colau es en la cifra de comisiones, que quedarán en cuatro, como las tenencias de alcaldía. La oposición no ha conseguido que haya una comisión específica para tratar las cuestiones de Seguridad, como ha sido habitual en mandatos anteriores. Según la propuesta del gobierno municipal, la comisión de Economía la presidiría Ciutadans, la de Presidencia CiU, la de Urbanismo el PSC y la de Derechos Sociales, ERC.