El PP agita el miedo a una victoria de Podemos

El Partido Popular ha cerrado esta noche una campaña electoral "dura y difícil" en Madrid agitando la bandera del miedo a la pérdida de libertades democráticas que entraña a su juicio Podemos, y el miedo incluso en clave personal: "[Mis rivales] tienen una sola propuesta, echarme a mí de la vida política, y algunos me quieren echar hasta de la vida", afirmó la candidata a la alcaldía de la capital, Esperanza Aguirre. "Madrid no se merece caer en manos de Podemos, no puede ser Caracas", aseguró la aspirante regional, Cristina Cifuentes, que terminó gritando "¡viva España!".

El presidente del Gobierno y del PP, Mariano Rajoy, alabó al PP, que "no es el resultado de una tertulia ni un producto de marketing", y cargó sin mencionarlo contra Ciudadanos: "Cuando se vota a un partido distinto al PP, se puede estar votando al PSOE y uno no se entera". Piropeó (fue el único) a Ana Botella, "una alcaldesa de primera". Marcó el camino a Aguirre: "Esperanza, has asumido muchas responsabilidades y todas las has hecho bien, ahora lo que toca es seguir engrandeciendo Madrid". Y dio la bienvenida a la primera línea política a Cifuentes: "Cristina, se te ve con ganas, ilusión, coraje y determinación, recibes una estupenda herencia y ahora te toca mejorarla". Al presidente regional, Ignacio González, no le mentó.

Rajoy cerró el acto en el Palacio de los Deportes, ante 9.500 simpatizantes (según el PP, lleno absoluto en las gradas abiertas al público). Lo había abierto Aguirre, señalando que, de las 11 campañas electorales en las que ha participado desde 1983, "ninguna ha sido tan importante" porque "nunca se había presentado con posibilidades de ganar una opción que quiere acabar con las libertades que nos garantiza la Constitución".

La candidata municipal pidió el voto "para cerrar el paso a los que quieren acabar con nuestro sistema de convivencia" e "instaurar el régimen bolivariano por el que suspiran, el régimen que acabará con la libertad de todos los españoles". "No vamos a caer en el odio", añadió en referencia al incidente de ayer en Carabanchel, "el odio de las caras de los que ayer mismo mandaban al hospital a unos compañeros nuestros por el delito de no pensar como ellos". "A los de Podemos", concluyó, "Madrid les da igual", sino que quieren usar Madrid "como trampolín para hacerse con el Gobierno de España y cambiar nuestro régimen de libertades".

Tomó la palabra a continuación Cifuentes, que empezó cargando contra los socialistas: "Quienes votan al PSOE, votan lo que ya hemos sufrido, incompetencia y despilfarro". Y su candidato, Ángel Gabilondo, "fue ministro del peor presidente de nuestra democracia, José Luis Rodríguez Zapatero". Pero, añadió, "esta inutilidad socialista todavía pude ser peor, porque se van a ver obligados a pactar con IU, una izquierda dogmática, sectaria, que no cree en la libertad, una IU desunida que se caracteriza por las luchas internas, un desastre... Y los otros".

Los otros son Podemos, "lobos con piel de cordero, que en un año se han convertido de bolcheviques en socialdemócratas". "Un partido contrario a la libertad" que "no quiere a España". Y, por último, mencionó a Ciudadanos, "que se presenta como algo nuevo, que mucha gente decía que era la marca blanca del PP y empieza a desvelarse como la segunda marca del PSOE". "Ciudadanos no es un PP renovado, votar a Ciudadanos es abrir la puerta a los gobiernos socialistas", concluyó.