_
_
_
_

Once años de cárcel por estrangular a su novia con un cable de teléfono

El tribunal señala que el acusado vivía a costa de las mujeres que conquistaba

Marc Rovira

La Audiencia de Tarragona ha condenado a once años de cárcel a José Romera, acusado de estrangular con un cable de teléfono a su novia, de 57 años, en un descampado de Vila-seca. El tribunal ha validado las argumentaciones del jurado popular, que catalogó los hechos como constitutivos de un delito de asesinato, pero suaviza los 20 años de pena solicitados por el fiscal, al considerar que el proceso se ha alargado injustificadamente en el tiempo y es un factor atenuante en el cálculo de la condena.

El suceso se remonta a la noche del 13 de mayo de 2007. El acusado estacionó el vehículo que conducía en una zona apartada de las afueras de Vila-seca y atacó violentamente a la que entonces era su pareja sentimental, una enfermera del hospital Sant Joan de Reus.

La pareja se había conocido un tiempo atrás a través de un chat, pero la relación se estaba deteriorando por las constantes peticiones de dinero que él hacía y que ella había satisfecho. Según las hijas de la víctima, el acusado se enriqueció con hasta 120.000 euros a costa de su madre. También la presionó hasta que le compró un coche. El jurado popular que juzgó el caso ya dejó constancia de que Romera se había especializado en vivir a costa de las novias que se iba echando.

Aquella noche de mayo algo se torció. Romera reaccionó con furia. Golpeó a la mujer y la estranguló hasta que la creyó muerta. Después se autolesionó en una pierna y corrió hasta un bar cercano clamando ayuda y anunciando que cuatro sudamericanos les habían asaltado. Clientes del bar testificaron durante el juicio que la actitud de Romera fue siempre sospechosa, porque parecía estar "tranquilo". Mientras la mujer esta completamente ensangrentada y agonizaba, a consecuencia de la violencia con qué se habrían ensañado los presuntos asaltantes, él solamente presentaba lesiones en una pierna.

La víctima resistió cuatro meses en coma antes de fallecer. La sentencia señala que, además de la cárcel, el condenado debe indemnizar con 110.000 euros en total a las hijas y los hermanos de la mujer a la que asesinó.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_