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El PSC se conjura para no quedar eclipsado entre Trias y Colau

Jaume Collboni reivindica el modelo legado por los socialistas

Blanca Cia
El alcaldable del PSC, Jaume Collboni, en un acto en Nou Barris.
El alcaldable del PSC, Jaume Collboni, en un acto en Nou Barris.Robert Bonet

“Salimos a ganar las elecciones, que quede claro”. No se resigna el candidato socialista, Jaume Collboni, a que la batalla por Barcelona se libre solo entre el actual alcalde, Xavier Trias, y la cara visible de Barcelona en Comú (BComú), Ada Colau. “Nofotem” es la expresión que utiliza Collboni para resumir ese sentimiento y que será uno de los lemas de la campaña que se inició horas después de haber digerido que la encuesta del CIS relega al PSC —el partido que gobernó la ciudad durante más de 30 años— al cuarto puesto con solo 5 concejales (ahora tienen 11), por detrás de C's, además de BComú y CiU.

No importaban demasiado las encuestas en la Via Júlia, de Nou Barris, donde arrancó la campaña en un acto al uso de la marca PSC: globos rojos, pica-pica y mucho Visca, visca, visca Barcelona socialista coreado por unas 600 personas que tampoco se quedaron quietas con la sintonía de campaña, Jump, de Van Halen. Le acompañaron Javi López, eurodiputado del PSC, Carmen Andrés —su número dos y regidora socialista adscrita a ese distrito— y de Jordi Hereu. “Yo vengo como telonero”, dijo el exalcalde.

Collboni se presenta como un socialista que reivindica la Barcelona de progreso —recupera un término del imaginario del PSC— que supone, en su opinión, una ciudad que da oportunidades —léase trabajo y prometió 30.000 puestos nuevos— y una vida digna a sus ciudadanos en lo más vital: vivienda, enseñanza y salud.

“Estamos orgullosos de la Barcelona que hemos construido entre todos, la de los Juegos y la de las bibliotecas, la de los centros cívicos y la de los barrios. Y no permitiremos que la derecha -—Xavier Trias— hunda lo construido”, enfatizó. El socialista recurrió al ataque como defensa: dijo que Barcelona no es el aperitivo de nada ni de nadie —en referencia al 27-S—; que la ciudad necesita un liderazgo claro y no estar al dictado de la Generalitat y que no puede ser que el alcalde cuelgue el cartel de “no molestar” y que lo resuelva todo con moratorias. Collboni se declaró orgulloso del trabajo realizado por el PSC y y también por ICV: “Resulta que esconde sus siglas, como si no estuviera orgullosa de lo hecho”. Y una dedicatoria final a BComú: “No somos una suma de siglas improvisada en seis meses. Somos un proyecto sólido”.

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Sobre la firma

Blanca Cia
Redactora de la edición de EL PAÍS de Cataluña, en la que ha desarrollado la mayor parte de su carrera profesional en diferentes secciones, entre ellas información judicial, local, cultural y política. Licenciada en Periodismo por la Universidad Autónoma de Barcelona.

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