El gerente de Imelsa autorizó gastos de 72.000 euros a un diputado
EU denuncia que el actual alcalde de Rótova cargó comidas y regalos durante cinco años Rafael Soler desmiente a Pérez Garijo y añade que su gestión está fiscalizada
“La trama va mucho más allá de Imelsa y Marcos Benavent”, aseguró ayer Ignacio Blanco, portavoz de EUPV en las Cortes y candidato a la presidencia de la Generalitat. La Fiscalía Anticorrupción investiga, tras la denuncia presentada el pasado 30 de julio a la Fiscalía Anticorrupción una supuesta trama creada por el exgerente de Imelsa —una empresa de la Diputación de Valencia—, Marcos Benavent, que está en paradero desconocido. La supuesta red habría cobrado comisiones a través de empresas pantalla a distintas contratistas de la corporación que preside Alfonso Rus.
Rosa Pérez Garijo, diputada de EUPV en la Diputación, ofreció ayer nuevos datos de la investigación que está bajo secreto de sumario. Según contó Pérez, el actual gerente de Imelsa, Rafael Soler, autorizó años antes, cuando ya estuvo al frente de esta sociedad pública, al exdiputado de Turismo y actual alcalde de Rótova, Antonio García Serra, gastos por valor de 72.000 euros en comidas, cenas y regalos, de los que 12.500 fueron a parar al bar del hermano del alcalde de Rótova. También se gastaron otros 3.000 euros en trajes bajo el epígrafe de “material promocional para turismo” con cargo al erario público, añadió la diputada. La documentación depositada al ministerio fiscal aborda el periodo de 2004 a 2009. Los gastos en comidas, cenas y regalos del exdiputado de Turismo se habría dado entre 2004 y, al menos, hasta 2007.
“Son también relevantes”, continuó Pérez Garijo, los gastos pagados en periodo de vacaciones. Eran justificantes de comidas, cenas, regalos en tiendas de tatuajes “e incluso pagos con dinero público para su asistencia a musicales en Madrid”. Por último, tras los comicios de 2007, Antonio García gastó en su último mes y medio como diputado cerca de 7.000 euros.
Los dos políticos de EUPV dieron a conocer estos datos a las puertas de la Diputación de Valencia, en plena calle, ante la negativa de la corporación a cederles la sala de las comparecencias al grupo de la oposición. Pérez Garijo contó que el propio Rafael Soler le recriminó en el pleno de la Diputación del martes que no denunciara los hechos al consejo de administración de Imelsa. “Optamos por ir donde teníamos que ir, que es a los tribunales y a la fiscalía”, reiteró la diputada, quien recordó que su grupo ha solicitado un montón de documentación sobre el caso que nadie le ha entregado todavía.
“Se tiene que investigar si en Imelsa hubo prácticas irregulares como son presuntamente pagar a unas empresas que a su vez pagaban a otra empresa que era propiedad del gerente [Marcos Benavent]”, remachó la diputada de EU.
Ignacio Blanco calificó de “paripé” la comparecencia que ofreció el martes el presidente de la Diputación, Alfonso Rus, en la que aceptó que la oposición dirija una comisión de investigación sobre la gestión de Imelsa.
El candidato a la presidencia de la Generalitat insistió en que la denuncia ante la fiscalía el año pasado va más allá del “negocio turbio de las carreteras, con las bombillas led, o del trato de favor a una empresa con la cesión de la plaza de toros”. Según Blanco, “se trata de un tema más importante y que podríamos definirlo como una trama organizada que conecta muchas irregularidades, escándalos, y actuaciones personales”.
Blanco respaldó el trabajo de la diputada Rosa Pérez Garijo, que “ha sido la única oposición real” a Rus y al PP al denunciar estos hechos. El síndic de EU cargó contra el presidente de la Generalitat y del PP, Alberto Fabra, al que hace responsable político de lo que hacen los miembros de su partido, especialmente cuando desempeñan cargos públicos tan relevantes como es el de presidente de la Diputación, y cuando además su partido renueva su confianza en Alfonso Rus como candidato a la alcaldía de Xàtiva”.
El candidato de EUPV a la presidencia de la Generalitat criticó que el presidente Fabra acudiese hace unos días a Xàtiva a abrazarse con Rus, “aunque fuera a desgana”, y recordó que hace unos años dio otro abrazo de apoyo al expresidente de la Diputación Carlos Fabra, “que todos sabemos está ahora en prisión”.
Réplica del gerente
El gerente de Imelsa, Rafael Soler, ha negado las acusaciones de EU de que durante su anterior mandato al frente de esta empresa pública un diputado cargó con una tarjeta 72.000 euros de gastos personales y ha asegurado que su gestión está "perfectamente fiscalizada" y la formación de izquierdas "miente".
Soler se ha defendido así de las críticas de la diputada provincial del EUPV Rosa Pérez, quien hoy ha asegurado que entre 2004 y 2006, bajo su mandato de Imelsa, el entonces diputado de Turismo y actual alcalde de Rótova, Antonio García, facturó a la entidad esa cifra en viajes, hoteles de lujo e incluso gastó 12.500 euros en un bar familiar.
En declaraciones a EFE, el actual gerente ha explicado que García era el único que tenía tarjeta a cargo de Imelsa porque como diputado de Turismo viajaba a cuatro ferias internacionales al año y ha explicado que si en los cuatro años acudió a un total de 16 certámenes, el gasto de 72.000 euros "no parece tan descabellado".
No obstante, ha asegurado que ha pedido todas las facturas para contrastarlas y ver qué hoteles de lujo y restaurantes son, tanto de los años en los que él estuvo al frente, "si están porque ya han prescrito", como en los posteriores.
Según ha dicho, Rosa Pérez "miente y miente a sabiendas" porque él mismo le explicó que acabó como gerente el 15 de abril de 2005 e incluso le enseñó su liquidación y sin embargo, ella ha incluido los gastos de García hasta 2006, diciendo que Soler estaba al frente de Imelsa y se ha preguntado por qué lo vincula si no estaba.
"Ha sido una sorpresa porque se ha convertido en un auténtico teatro", ha apuntado, a la par que ha dicho las acusaciones de Pérez son "una ataque personal" contra él porque en la última junta de portavoces, a la que fue invitado, le recriminó su deslealtad con Imelsa por no haber entregado la documentación que tenía al consejo de dirección, independientemente de si las llevaba ante la Fiscalía.
En su opinión, "buscando un rédito personal de oportunidad política, no comunicó a Imelsa los datos que habrían causado el cese inmediato del gerente", Marcos Benavent.
Ello ha provocado que siguiera seis meses más y haya podido "sustraer documentación de la empresa y crear un perjuicio económico", por lo que considera que Pérez "tiene responsabilidad" porque esa información "hubiera servido para atajar el problema".
Según Soler, la diputada provincial de EU aprovecha cualquier declaración para decir que no se le pasa la documentación que reclama cuando ha pedido tres documentos y ya le han facilitado dos.
Respecto a los 3.000 euros que la diputada achaca con cargo a Imelsa para la compra de trajes, Soler ha asegurado que el entonces diputado de Turismo les ha explicado que "era para ropa de todo el equipo de turismo y la pagó de su bolsillo y tiene la factura".
"Todos los gastos que yo he pagado a cualquiera que haya pasado una factura están certificados, con soporte y documentados", ha aseverado Soler, quien ha incido en que lo que él ha gestionado está "perfectamente fiscalizado".
Soler ha asegurado que ha puesto el asunto en manos de sus abogados por si las declaraciones de Pérez fueran susceptibles de interponer una querella por calumnias.
Ha negado que en las nóminas de Imelsa haya gente vinculada al PP como ha señalado Pérez y en concreto, ha dicho que los responsables de los departamentos jurídico, financiero y de recursos humanos "son ajenos a cargos del PP y no están aquí por ser del PP".
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