Suspendido de empleo y sueldo el jefe de Emergencias de Reus

El jefe de Emergencias y Protección Civil de Reus, Domingo González Rivero, ha sido suspendido de empleo y sueldo durante un periodo de 16 meses por supuestas irregularidades relacionadas con el desempeño de su puesto de funcionario municipal. La sanción culmina un expediente disciplinario que le abrió el Consistorio por causas que no quiere confirmar pero que, según Reusdiari.cat, guarda relación con reiterados incumplimientos de sus tareas profesionales y con el uso particular de los recursos públicos que tenía a su disposición en virtud de su condición de mando en un puesto del organigrama municipal. Domingo González está apartado del cargo desde primeros de abril y sus funciones las ha asumido un técnico de la misma área.

En cualquier caso, hay un vacío de poder en el departamento porqué el sustituto de González Rivero está de vacaciones hasta fin de mes. Este detalle se pone como ejemplo de lo inesperada que era la inhabilitación del hasta ahora jefe de Emergencias en su propio entorno laboral. "Ha trabajado directamente con los últimos cuatro concejales y no nos consta ninguna queja", destacan en las oficinas municipales.

El departamento está compuesto por cuatro trabajadores y depende de la concejalía de Vía Pública, pero tiene sus propias dependencias en la calle Sant Joan. Sus funciones son básicamente preventivas, porque el ente se encarga de redactar y trazar los planes de emergencias y de coordinar, ante un posible suceso o accidente, a los efectivos de Protección Civil para que den soporte a los equipos profesionales de emergencias.

El de González Rivero es un puesto de poca acción, y más para un hombre que tuvo competencias directas en materia de seguridad. Hasta 1999 fue jefe de la policía municipal. Ya entonces se vio envuelto en una agria controversia y tuvo que presentar su renuncia. Esgrimió "motivos personales" después de que un agente del cuerpo disparara su arma reglamentaria contra el vigilante del depósito municipal. El que se conoció como caso de la Ruleta rusa terminó con la carrera policial de González Rivero, acusado de mostrar poca colaboración para el esclarecimiento de unos hechos que arrancaron con un temerario juego de pistolas entre agentes y vigilantes privados y que se saldaron con la imputación de ocho agentes municipales, el jefe entre ellos.

González Rivero pidió en febrero de 2013 reincorporarse al mando de la policía municipal reusense alegando que el cargo lo desempeña uno que no tiene rango suficiente.