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Los nuevos catalanes de la familia Trias

Convergència organiza un acto preelectoral con el alcalde de Barcelona y asociaciones de inmigrantes, que el ministro del Interior vinculó con el yihadismo

Cristian Segura
Trias saluda un miembro de Nous Catalans.
Trias saluda un miembro de Nous Catalans.juan barbosa

Nous Catalans, presunta célula yihadista catalana según el Gobierno –la sectorial de inmigración de CDC según la versión oficial–, organizó ayer una fiesta de la diversidad para Xavier Trias. Más de setenta asociaciones de inmigrantes fueron al encuentro con el alcalde de Barcelona, según el recuento de Àngel Colom, director de Nous Catalans. Trias quería demostrar que se quiere a los nuevos patriotas venidos de tierras lejanas como si fueran de la familia: "El futuro sois vosotros. Nuestros hijos e hijas se casarán con vuestros hijos e hijas".

Permiso de trabajo para los "alegales"

Fue un acto extraño porque, como que oficialmente todavía no estamos en campaña, no se podía pedir el voto. Aún así, Colom aseguró en nombre de los presentes que confía en que Trias continúe de alcalde. "No metas la pata", respondió Trias.

El candidato Trias vestía el mono de trabajo con un potencial electorado. "Ha venido una gran cantidad de gente a trabajar aquí. Habéis venido a ayudarnos a sacar el país adelante. Pero nos ha pasado una cosa jodida. Una vez habéis llegado aquí, ha aparecido una crisis durísima. Y ahora, ¿qué tenemos que hacer? De aquí, ¡no se irá nadie! Porque, no nos engañemos, aquí no se vive mal". Trias aseguró que él es partidario de que la "gente que se encuentra en una situación, entre comillas, de alegalidad reciban un permiso temporal de trabajo". La propuesta recibió pocos aplausos, o menos de los que se merecía, seguramente porque la mayoría del público apenas entendía el catalán. Detrás de mí, dos indios sikh, con el turbante y el móvil sin dejar de sonar, admitían que no entendían nada de lo que decían los conferenciantes. Dos filas más atrás, dos marroquíes tampoco entendían los discursos y me pedían que les hablara en castellano.

En Cataluña no hay inmigrantes

Buena parte de los asistentes, unas 200 personas, comparecieron convocados por las agrupaciones que tienen relación con Miquel Esteve, comisionado de inmigración del Ayuntamiento. Esteve pidió a los presentes que "tenemos que dejar de hablar de inmigración para hablar de diversidad". Estas palabras llegan una semana después de que Artur Mas asegurara en la Universidad de Columbia de Nueva York que "en Cataluña no hablamos de inmigrantes, hablamos de catalanes de origen diferente". El director general de Inmigración de la Generalitat, Xavier Bosch, confirmó que la idea es seguir el mensaje de Mas: "Nos gustaría cambiar inmigración por migración y diversidad".

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De vez en cuando algunos esporádicos lanzaban vivas a "Catalunia". El momento en que el público se alborotó más fue cuando Colom cargó contra Jorge Fernández Díaz. "¿Ahora veis por qué lo quieren cascar, verdad?", añadió Trias en tono de humor. El alcalde caricaturizó al ministro del Interior como un pirómano al que "le gusta encender cerillas. Es muy fácil encenderlas. No se tiene que hacer caso a este señor", dijo Trias.

Los tres mismos chicos que habían gritado vivas durante la conferencia, los repitieron cuando más tarde era el turno de fotografiarse con el alcalde. Colom también estaba muy solicitado, más que Trias, por presidentes de asociaciones que le querían presentar algún miembro nuevo. Las ponencias de Colom y Trias fueron precedidas por las palabras de cinco catalanes de origen diferente, todas optimistas con el trabajo de CDC. El primero que celebró la Barcelona de Trias fue Gevorg, un estudiante de Criminología de origen armenio. Según Gevorg, "Barcelona es una ciudad con mucho futuro para los jóvenes, puesto que si tenemos estudios, podemos acceder al mundo laboral". Gevorg lamentó que el Gobierno no reconozca el genocidio armenio y acabó su intervención llamando vivas a Cataluña, Armenia y Trias.

El alcalde al teléfono

La segunda que tenía que intervenir fue Aksha, una pakistaní de 14 años que de mayor quiere ser médico, pero que no lo pudo explicar, porque se quedó bloqueada por los nervios. Estefania Enrique, ecuatoriana de 21 años y estudiante de Turismo, dio las gracias a los catalanes de origen antiguo "por dejarnos sentir que somos parte de vosotros, por hacernos sentir que somos nuevos catalanes". Marie Françoise Affoua, de Costa de Marfil, pidió la ayuda de Trias para su asociación de mujeres africanas Codaf: "Queremos el apoyo del Ayuntamiento porque queremos mostrar la diversidad de Cataluña. La gente me pregunta qué me gusta de Cataluña y yo siempre digo que es una madre. Que en Cataluña siempre hay un lugar para ti". Marie Françoise Affoua acabó dando las gracias "a Cataluña y a los políticos de aquí". Trias cerró el apartado de interacción con los catalanes de origen diferente ofreciendo a Aksha su número de teléfono: "Siempre que necesite algo desde el punto de vista médico, para su formación, solo tiene que telefonearme".

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Sobre la firma

Cristian Segura
Escribe en EL PAÍS desde 2014. Licenciado en Periodismo y diplomado en Filosofía, ha ejercido su profesión desde 1998. Fue corresponsal del diario 'Avui' en Berlín y en Pekín. Desde 2022 cubre la guerra en Ucrania como enviado especial. Es autor de tres libros de no ficción y de dos novelas. En 2011 recibió el premio Josep Pla de narrativa.

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