‘RéserVoir’, pasado y presente de Manel Clot

El crítico de arte y comisario independiente Manel Clot vuelve a La Capella, 20 años después de su primera exposición en esta sala. Aquellos que entonces eran artistas emergentes, rompedores y heterodoxos, ahora han superado la media carrera y están ampliamente consolidados y reconocidos. Clot los ha reunido en RéserVoir, una exposición entre pasado y presente, que pone de manifiesto una original metodología de trabajo basada en conexiones afectivas y complicidad intelectual. Se trata de creadores que comparten el interés por temáticas de géneros e identidad y por soportes que combinan textos e imágenes en narrativas inéditas. Como introducción a esta colectiva, abierta hasta 17 de mayo, hay un conjunto de frases, títulos, versos, nombres, aforismos y enigmas, que Clot ha ido recopilando durante años hasta reunir un verdadero Museo de Frases. “El 23 de octubre de 2003, un mes antes de cumplir los 47 años, me di cuenta de la ingente cantidad de palabras que había guardado y decidí empezar a sistematizarlas en una colección atemporal y ajena a jerarquías, que abre el recorrido y sirve de marco conceptual a esta muestra”, explica Clot, que ha contado con la colaboración de Xavier Manubens para un montaje que ofrece diferentes capas de lectura.

Cada uno de los diez artistas exhibe una obra nueva, realizada para la muestra, y una vitrina en la que recupera elementos de anteriores proyectos realizados con Clot, que se caracterizan por el interés en las publicaciones.

Javier Peñafiel presenta una película animada con textos y dibujos que actualizan algunos temas de entonces, como la temática queer y las cuestiones de géneros. “Quizás tenga complejo de Casandra, pero lo que hace 20 años no se entendía y era patrimonio de unos pocos, se ha convertido en un tema central de la actualidad”, indica Peñafiel. Su trabajo enlaza con la instalación homoerótica de Francesc Ruiz, que adelanta algunos de los elementos que expondrá en el Pabellón de España en la próxima Bienal de Venecia y la actualización de un proyecto de investigación sobre el lenguaje y la censura de Joan Morey.

La muestra aborda

“La obra, que consiste en unas pancartas dobladas y clavadas al suelo de modo que sea imposible leer su mensaje, alude a la frustración del lenguaje y las formas de acallar la voz pública”, explica Morey. Carles Congost, otro de los artistas fetiche de Clot, exhibe un irónico documentario, donde un actor que le representa habla de cinco proyectos que nunca ha llegado a realizar.

“El relato de estas obras frustradas, me permite hablar de todo lo que ha pasado en estos quince años: la burbuja y la crisis, las relaciones interpersonales y sociales, la idiosincrasia y las dudas”, indica Congost. Completan la selección Esther Partegàs, que en sus imágenes convierte bolsas de basura en obras de arte y Luz Broto con un pase de diapositivas que recuerda la intervención Dar paso a lo desconocido, que realizó en 2010, entonces en una sombría Capella. “En aquella ocasión Broto abrió todas las aperturas posibles, puertas, ventanas y lucernarios, que estaban cerradas desde que la iglesia se convirtió en sala de exposiciones hace más de 30 años, quedando aislada del exterior. Cuatro años después de aquella performance, esta obra recuerda desde diferentes perspectivas lo que pasó y las reacciones que provocó”, concluye el director de La Capella, Oriol Gual.