La experiencia de alcalde

Alberto Ruiz de Azúa (Arrigorriaga, Bizkaia, 1960) considera que ser alcalde es una "de las aventuras más apasionantes en nuestra sociedad democrática". Después de haberlo comprobado durante doce años en su propio pueblo, ha decidido escribir un libro. Alcaldeando (Dïeresis, 237 páginas) es el título de su primera creación literaria, que acaba de presentar en Bilbao.

El autor, licenciado en Derecho y con plaza de funcionario en el Ayuntamiento de Bilbao, ha venido desempeñando varios cargos públicos que elevan su experiencia institucional. Después de ejercer la abogacía durante 13 años, en 1999 es elegido alcalde de Arrigorriaga por el PNV, cargo en el que se mantuvo durante tres legislaturas. Apoderado en Juntas Generales de Bizkaia en 2011, meses después abandonó este escaño para incorporarse al Ayuntamiento de Bilbao como director del Área de Atención Ciudadana y Fiestas, en el que se mantiene.

Para reforzar la proyección del papel de un alcalde que se recoge en este libro, Ruiz de Azúa elige una cita de José Ángel Cuerda, reconocida figura política que mantuvo esta condición durante 20 años en el Ayuntamiento de Vitoria y que es el autor del prólogo. "Si tienes vocación y oportunidad de ejercer el liderazo en cualquier ámbito de la vida, este manual va a resultarte muy útil", señala en la contraportada del libro.

El autor sostiene que en España hay más de 8.000 líderes desconocidos, que son los alcaldes. "Dirigen grandes urbes, pequeñas capitales, pueblos y aldeas. Casi todos ellos gestionan entidades mucho mayores que cualquier empresa, con más personas. con un presupuesto más alto y, sobre todo, con una responsabilidad pública muy elevada y exigente". Según Ruiz de Azúa se trata de "una escuela de liderazgo que todo podemos aprender".

Ruiz de Azúa admite que alcaldeando es "un palabro" que no recoge la Real Academia, pero que "reivindico" para reflejar un concepto que representa la base de su libro. Se trata del versátil trabajo diario de un alcalde, que comprende desde el contacto con los vecinos, a los compañeros de partido y corporación, las múltiples gestiones y el servicio diario de una prestación personal, basada en el trabajo y la comunicación.

En sus páginas, no solo recrea las experiencias personales y políticas vividas dentro y fuera del Ayuntamiento por su condición de alcalde. Aprovecha la oportunidad para aportar una serie de consejos para quienes se inician en la gestión municipal. De paso, recuerda escenarios que no pasan desapercibido al lector de perfil político. Ruiz de Azúa admite que nunca olvidará el consejo de Xabier Arzalluz cuando coincidieron almorzando en un restaurante y como alcalde iba acompañado por dos empresarios. "Espero que pagues tú", le recomendó al oído.

En el libro, con numerosas referencias a hechos históricos que dejan huella, Ruiz de Azúa elogia la trayectoria humana y profesional de Juan Mari Aburto, pero también desvela una confidencia. Recuerda cómo Juan Mari Atutxa, en medio de tantos intentos frustrados de atentado por parte de ETA, recomendó a su mujer, Begoña, que "si un día me matan" acudiera siempre a Aburto "porque es la mejor persona que te va a atender y entender".