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Trias deja pendientes los proyectos de los barrios pese a tener superávit

El alcalde acaba el mandato presumiendo de gasto social, aunque se mantienen las desigualdades

Clara Blanchar
Ada Colau saluda a Jaume Collboni en el salón de plenos del Ayuntamiento, ayer.
Ada Colau saluda a Jaume Collboni en el salón de plenos del Ayuntamiento, ayer. Consuelo Bautista

El alcalde de Barcelona, Xavier Trias, deja un Ayuntamiento saneado, con un superávit de 140 millones, paga a sus proveedores y ha aumentado el gasto social un 43% en los últimos cuatro años. Pero Trias también cierra el mandato con una ciudad donde crecen las desigualdades. El alcalde ha gobernado en minoría y cierra los cuatro años de Gobierno municipal sin haber aprobado el plan urbanístico para regular los apartamentos turísticos; ni el de los Tres Turons; ni la modificación de La Marina del Prat Vermell o la Verneda industrial; ni los planes de usos de Gràcia, Poble Sec y Horta. No ha logrado consenso para que echaran a andar proyectos como la Montaña de los Museos, las Puertas de Collserola o las superilles del Eixample; no ha cerrado la protección de los comercios emblemáticos.

No ha construido ni un piso de promoción pública. Deja un sobrecoste de las obras de la Diagonal de cuatro millones de euros; y las cuentas de la mayor empresa municipal, BSM, sin aprobar por segundo año. En cambio, además de la Diagonal ha reformado el paseo de Gràcia, ha levantado la controvertida marina de lujo del Port Vell, ha aprobado el plan de usos de Ciutat Vella y la ampliación de La Maquinista (con la que la ciudad pierde suelo industrial y dobla superficie comercial).

Trias tampoco ha cumplido su compromiso de celebrar consultas ciudadanas. Ni una. Y hay varios conflictos o proyectos parados como consecuencia de la presión ciudadana: Can Vies, la plaza de Botticelli, el PGM de Vallcarca, salvar o no el parque de l'Oreneta y Torre Garcini, la ampliación o no del Heron City o el proyecto de parque temático de La Sagrera.

A dos meses para celebrar las elecciones muncipales, ha llegado por los pelos a licitar los túneles de Glòries y acaba de terminar la urbanización provisional de la plaza. También cerrará in extremis el acuerdo para transformar el Morrot o la remodelación de Pere IV, e iniciará simbólicamente el derribo de una esquina de La Modelo. También ha aprobado inicialmente el planeamiento para hacer un hotel en la torre del Deutsche Bank.

Cuando ayer, en el último pleno ordinario, el PP preguntó al alcalde qué balance hace de su mandato, Trias respondió: “Lo valoro positivamente, con satisfacción moderada porque no puedes estar contento cuando en la ciudad hay 100.000 parados”. Así sintetizó su mandato: “Hemos cogido confianza, no hacemos déficit, pagamos a 30 días, invertimos como nunca, somos la punta de lanza de la recuperación económica de toda España, somos referentes en sectores como las TIC, hemos incrementado un 43% las ayudas sociales, colaboramos con el tercer sector como nunca antes, tenemos proyección internacional, la gente quiere venir a formarse e invertir en Barcelona, e invertimos en el funcionamiento de la ciudad”.

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Sobre la firma

Clara Blanchar
Centrada en la información sobre Barcelona, la política municipal, la ciudad y sus conflictos son su materia prima. Especializada en temas de urbanismo, movilidad, movimientos sociales y vivienda, ha trabajado en las secciones de economía, política y deportes. Es licenciada por la Universidad Autónoma de Barcelona y Máster de Periodismo de EL PAÍS.

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