Feijóo deja la educación fuera del pacto por el gallego
El presidente insiste en que la oposición "manipula el dolor" de los enfermos de hepatitis
El miércoles, tres días después de la manifestación en la que miles de personas pidieron que la Xunta cambie su política lingüística ante el constante retroceso del número de hablantes en gallego, el presidente, Alberto Núñez Feijóo, anunció en el Parlamento un proyecto para dinamizar el idioma en los ámbitos social y económico. Será un plan, dijo, “junto con la Real Academia Galega”, que hace dos semanas emitió una declaración institucional en la que alertaba del deterioro del idioma y pedía a la Xunta que derogase el decreto con el que en 2010 redujo unilateralmente la presencia del gallego en la educación. Este jueves, Feijóo admitió que la negociación con la Academia para elaborar ese plan de dinamización aún no ha comenzado, como confirma la propia institución. Pero el presidente ya le ha enviado un mensaje: la educación quedará al margen, ya que el Gobierno gallego no se plantea anular su decreto salvo que le obligue la justicia.
Según Feijóo, la responsabilidad educativa es de la Xunta y no negociará en ese ámbito sino solo para potenciar el uso personal del idioma propio. “Que se conozca el gallego hablado y escrito, eso sí que es una responsabilidad nuestra; ahora, hablarlo, eso es una responsabilidad que la propia Academia acepta que es de todos”, dijo el presidente.
No hubo ni un atisbo de autocrítica en las respuestas que sobre el deterioro de la lengua gallega ofreció Feijóo en la rueda de prensa tras la reunión semanal de su Gobierno. Sí reconoció errores su nuevo conselleiro de Educación, Román Rodríguez, que en su primer acto en el cargo —clausuró en la Cidade da Cultura un proyecto de educación financiera del BBVA— admitió la incapacidad del denominado decreto del plurilingüismo para generar consensos. Según la visión de Rodríguez, el consenso alcanzado en 2004 con la aprobación del Plan de Normalización Lingüística “ya estaba roto” cuando el PP recuperó el poder en 2009 e impulsó el nuevo decreto para “recuperarlo”, algo que, dijo, “obviamente, no se logró”. En este escenario, el nuevo titular de Educación apuesta por potenciar el uso “voluntario” y “activo” de la lengua propia en la sociedad.
Enfermos manipulados
En la rueda de prensa de ayer Feijóo también se pronunció, a preguntas de los medios, sobre el desalojo el miércoles de enfermos de hepatitis C del Parlamento de Galicia por sus protestas contra la decisión del PP de rechazar sus peticiones. El presidente criticó que haya “diputados en la oposición” que crean tener criterios médicos y técnicos y que, a su juicio, “lo que están es manipulando el dolor las expectativas de curación de muchas personas”.
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