Héctor Moreno suma galones

Extendió los brazos en cruz. Guantes negros en las manos. Y gritó: “¡Salgamos! ¡Hay que juntar las líneas ya!”. “El Héctor que llegó al Espanyol hace tres años y medio no tiene nada que ver con el de hoy”, se analiza Héctor Moreno (Culiacán, México; 1988). El central llegó al Espanyol en el verano de 2011 desde el AZ Alkmaar y aunque siempre fue indiscutible en el once inicial, su rol se agigantó. En su espalda suma dos mundiales, 57 internacionalidades con México, y más de 220 partidos en el fútbol europeo. “Cuando llegué a Barcelona Pochettino me pedía que me convirtiera en líder. Hay diferentes maneras de ejercer el liderazgo, algunos gritan, otros putean, yo trato de pedir la pelota y ayudar a los más jóvenes”, resume el zaguero.

En los despachos de Cornellà pusieron el grito en el cielo cuando Moreno se fracturó la tibia en el Mundial de Brasil. En los octavos de final frente a Holanda el central chocó contra Robben y acabó el sueño mundialista del defensa y la ilusión de hacer caja para el club. “He visto el golpe mil veces por fotos. Había barrido de esa manera en un montón de ocasiones y no me había pasado nada. Cuando pasó la lesión veía la posibilidad de volver a jugar tan lejos que ahora estoy disfrutando mucho”, cuenta Moreno, que se ríe cuando su nombre aparece habitualmente en la lista de transferibles. “Si me creo todo lo que dicen ahora estaría jugando en las Chivas o en el Manchester. Este mercado estaba tranquilo, llevaba seis meses sin jugar y quería sentirme importante en el Espanyol”, afirma Héctor.

En el vestuario y en el cuerpo técnico del Espanyol no hay dudas: “Desde que volvió Héctor el equipo cambió”. Con Moreno en el césped el cuadro de Sergio González, hoy semifinalista de la Copa del Rey frente al Athletic (22.00 horas, Antena 3), mostró su mejor versión de la temporada. “Tiene una salida de balón increíble. Eso permite que iniciemos mejor el juego desde atrás”, explica Víctor Sánchez. “Su fútbol es atrevido y eso hace que el equipo esté más junto”, interviene Casilla. “Brinda tranquilidad”, suma Colotto. “Está siempre pendiente de sacar la defensa del área”, completa Álvaro.

Llamado a ser el heredero de Rafa Márquez —“Héctor sería claramente un sucesor para la capitanía de México”, dijo el ex azulgrana—, Moreno suma galones en el Espanyol. “Al principio Europa me costó. Lo hacía bien, pero no tenía eso que Pochettino me pedía. Ahora me siento con esa comodidad y confianza”, concluye el zaguero blanquiazul.