Podemos elige líder en Euskadi sin interferencias de la dirección nacional

El proceso constituyente de Podemos Euskadi, que culminará este próximo sábado con la publicación de los resultados de la votación abierta desde este lunes, ha despertado un mayor interés que la elección de los secretarios generales de las tres capitales vascas, celebrada a comienzos de enero pasado.

Así se desprende al menos de la cifra de inscritos para participar en los comicios internos para proclamar al nuevo secretario general y a los 34 miembros del Consejo Ciudadano de Euskadi. Alrededor de 10.300 personas —6.900 de Bizkaia, 2.300 de Gipuzkoa y 1.100 de Álava—, frente a las 1.567 que votaron en las locales, están autorizadas para votar por Internet en unas elecciones a las que concurren tres candidaturas: Orain Ahal Dugu, Euskal Hiria y Sí se Puede Euskadi.

Serán unas elecciones en las que la dirección nacional se ha mantenido al margen de la contienda electoral. Así como en las locales el número tres de Podemos, Juan Carlos Monedero, avaló a Hannot Sansinenea e intervino junto a este en un acto en San Sebastián, esta vez ninguno de los aspirantes ha recibido el apoyo explícito de la cúpula, ni ninguno de los primeros espadas ha participado en la campaña, como sí ha ocurrido con Íñigo Errejón en sendos actos en Cantabria y Navarra, por ejemplo.

La primera lista en anunciar su concurso fue Euskal Hiria, formada en su mayoría por profesores universitarios y encabezada por Roberto Uriarte, que imparte Derecho Constitucional en la UPV. Esta lista tuvo un acercamiento con Orain Ahal Dugu, liderada por Luis Ángel Sánchez de Lachina, técnico en prevención de riesgos laborales, para conformar una plancha conjunta, aunque las conversaciones que mantuvieron no fructificaron, pese a la buena sintonía que aseguran mantener ambas.

Cuando vencía el plazo para presentar candidaturas, la abogada Iratxe Osinaga dio el paso al frente como cabeza visible de Sí se Puede Euskadi.

Las dos primeras opciones, más favoritas que la tercera, han respetado durante la campaña el pacto de no agresión al que se comprometieron. “Hemos competido de forma amable. Ha sido un balneario, a diferencia de otras comunidades”, asegura Uriarte. Euskal Hiria y Orain han acordado, incluso, dejar vacantes los últimos puestos de sus listas para integrar a miembros de otras candidaturas en el Consejo Ciudadano. Así, es probable que la lista ganadora ocupe dos tercios de este órgano y el resto quede para el resto.

Los tres aspirantes defienden postulados genéricos muy similares en sus respectivos manifiestos, heredados de las grandes líneas programáticas que se ha dotado la formación nacional, como la “democracia real”, la “defensa de todos los derechos civiles y políticos”, y medidas como el fin de las “puertas giratorias y la corrupción política”.

Sí se puede Euskadi incluye el compromiso de convocar, si resulta elegida, asambleas ciudadanas provinciales “para decidir sobre nuestra participación en las próximas elecciones forales” de mayo. Uriarte sostiene que el programa de Euskal Hiria está “más adaptado a la realidad vasca, sin copiar planteamientos estatales”.

Sobre el debate sobre la identidad nacional, los tres candidatos enarbolan la defensa del derecho a decidir. Orain apoyará la “toma de decisiones sobre la territorialidad desde abajo”; Sí se Puede emplea la misma formula, y Euskal Hiria incluye en su manifiesto la “defensa del derecho de autodeterminación de los pueblos”. Ninguno ha desvelado sus preferencias ante posibles pactos poselectorales.

Euskal Hiria se arroga el apoyo de la dirección, reconoce Uriarte, aunque no ha querido “utilizar esta cuestión” durante la campaña “porque iba a perjudicar a nuestra candidatura y al consejo nacional”. Orain, por su parte, cuenta con el respaldo de una veintena de secretarios generales de organizaciones municipales, entre ellas la de Bilbao, la que concentra la mayor afiliación. A los comicios internos también se presentan 28 personas a título individual, aunque algunas de ellas son de los grupos con listas cerradas.

Los estatutos nacionales exigen que el Consejo Ciudadano debe ser paritario, un requisito que solo cumple Euskal Hiria (11 de cada sexo). Orain integra a ocho mujeres de un total de 24 y Sí se Puede a 22 hombres y 12 mujeres.