“La fragmentación en estas elecciones municipales puede beneficiar al PP”

Alberto Fernández Díaz (Barcelona, 1961) se presentará por cuarta vez a las elecciones municipales en Barcelona, aunque la designación oficial por parte del comité electoral del PP no se producirá hasta mediados de febrero. Mantiene que su resultado será una sorpresa y recuerda que el PP ha mejorado sus resultados hasta alcanzar nueve concejales en 2011, acercándose al PSC (11) y CiU (14).

Pregunta. ¿Cómo lleva ser junto al alcalde Xavier Trias el candidato más veterano?

Respuesta. La experiencia es un grado: aportas un conocimiento de la ciudad y del Ayuntamiento que es una garantía, un aval a la candidatura.

P. ¿Cree que el debate soberanista contaminará el habitual eje izquierda-derecha?

R. Yo apostaré por el eje de la mejor Barcelona, que se proyecta con prioridad social, de empleo y atención a las personas, en los barrios y en el ADN Barcelonés que es el antídoto al independentismo. Si tiene que haber debate no es sumar Barcelona al proyecto independentista de Mas, sino reclamarle el trato capital que se merece en deuda, inversiones y financiación.

P. Las encuestas no les dan muy buenos resultados, puede haber pacto CiU-ERC, ha irrumpido Guanyem… ¿qué expectativas tienen?

R. Vamos a seguir siendo la sorpresa de las municipales. Hace cuatro años el PP creció dos concejales, de 7 a 9. Los mismos que subió CiU.

P. ¿Temen a Ciutadans?

R. Obtuvieron un 7% en el Parlament, pero Ciutadans no es mi adversario. Mi adversario es un Trias independentista y una izquierda cada vez más radical. La fragmentación por un lado y la concentración por otro, puede dar más protagonismo al PP. Empezamos siendo un partido testimonial en Barcelona y ahora ante un Trias debilitado por ERC estamos en condiciones de acercarnos mucho y esto nos abre muchas expectativas.

P. ¿Descarta, llegado el caso, votar la investidura de Trias?

R. Si no lo hice hace cuatro años cuando no proclamaba la independencia es difícil que lo haga ahora. Nosotros no hemos aprobado presupuestos de 2013, 2014 ni 2015, y no ha habido pactos de legislatura. Lo que sí hemos hecho es llegar a acuerdos de ciudad con Trias, con la misma actitud con la que llegué de concejal, firmando acuerdos con Pasqual Maragall para que los Juegos Olímpicos fueran un éxito. Barcelona está por encima de las siglas de los partidos. Es una cuestión de responsabilidad.

P. ¿Cree que su electorado entiende que por un lado critique a Trias y por otro le salve proyectos clave?

R. Al revés. Hemos puesto Barcelona al margen del debate partidista, la línea es de hacer oposición nítida y de actuar con responsabilidad. ERC era testimonial, ICV está en el magma de la reorganización de la izquierda y el PSC está desaparecido. La oposición más sólida ha sido la del PP: hemos plantado cara al Trias más independentista, hemos criticado su gestión en seguridad o con Can Vies…, y hemos acordado inversiones para que se puedan acometer obras en barrios.

P. Critican el modelo turístico pero aprueban operaciones como la del Deutsche Bank.

R. Lo que critico es que Trias ha convertido la oportunidad del turismo en un problema por su equivocada gestión, que provoca problemas de convivencia. Cuando nadie hablaba del problema turístico, en 2013 yo ya reclamé una hoja de ruta para gestionarlo mejor. En el caso del banco, irá a información pública, habrá un proyecto urbanístico, el Ayuntamiento se tiene que volver a pronunciar y hasta ahora la permuta de usos beneficia a todas las partes: habrá un hotel más, Barcelona obtiene gratis equipamientos y dos entidades obtienen ingresos. No fui yo quien apoyó convertir la fachada del Fòrum en un continuo de torres y hoteles de lujo.

P. Hablando de fachada marítima. ¿Habrá museo militar?

R. Habrá un museo militar, no de exaltación de la guerra, de historia y en valores, todas las grandes capitales europeas lo tienen.

P. ¿Cuáles son sus prioridades de ciudad?

R. La lucha contra la crisis y el empleo. Consolidar el fortalecimiento de las políticas sociales. Y la convivencia en su sentido más amplio: desde la seguridad ciudadana hasta la compatibilidad de usos ante el choque se puede producir entre turistas y vecinos.

P. ¿Esto pasa por multar a los turistas?

R. Si son incívicos, sí. La delincuencia y el incivismo no tienen nacionalidad; ser turista no es ser un privilegio en Barcelona, no se le pueden permitir infracciones. Hay que promover los cambios oportunos para que las sanciones a los turistas sean efectivas y los hechos no tengan impunidad.

P. ¿Qué balance hace de la gestión de Trias?

R. Yo le veo un alcalde timorato y sumiso. Timorato a la hora de tomar decisiones trascendentales para Barcelona, lo ha demostrado en Can Vies, a la hora de definir el modelo turístico, de promover cambios normativos … Y sumiso ante el independentismo de Artur Mas y la renuncia a defender los intereses de Barcelona.

P. Es abogado pero lleva en el Ayuntamiento desde 1987 ¿Hasta cuándo tiene ganas de seguir?

R. Se habla mucho de renovación, yo creo que no hay conflicto entre experiencia y renovación. Ambos son valores imprescindibles. Algún día tendré que volver a ejercer de abogado. En estas elecciones municipales no me lo planteo, habrá que plantearlo en el día después, cuando aspiras a ganar no piensas en dejarlo. Es la pregunta del millón, pero no voy más allá.