La Universidad de Málaga sigue adelante con el expediente a Errejón
El dirigente de Podemos fue suspendido de empleo y sueldo en diciembre por supuesto incumplimiento de contrato
La Universidad de Málaga continuará adelante con el expediente disciplinario abierto al dirigente de Podemos Íñigo Errejón. La investigación para determinar si el responsable de la Secretaría Política del partido de Pablo Iglesias incumplió su contrato como investigador de este centro, que el pasado 4 de diciembre derivó en una suspensión de empleo y sueldo, estaba atascada porque Errejón se desvinculó laboralmente de la institución unos días más tarde, el 16 de diciembre, al renunciar a su contrato. Esa salida creó una situación administrativa que ha habido que resolver y la conclusión ha sido continuar adelante con el expediente.
A partir de ahora, según las fuentes consultadas, no hay plazo para culminarlo. La propuesta de continuar con esta posible medida sancionadora la realizó este viernes la rectora de la UMA, Adelaida de la Calle, ante el consejo de Gobierno de la Universidad, formado por 56 personas, y salió adelante con solo seis abstenciones, según las fuentes.
La norma por la que se rigen las universidades establece que si una persona con un expediente abierto termina su relación contractual, ese expediente queda en suspenso salvo que alguna de las partes implicadas en el proceso quiera continuarlo. En este escenario, la UMA preguntó cuál era su postura en este caso a varios departamentos de la Junta de Andalucía (Fomento y Vivienda, Presidencia y secretaría general de Universidades), que es quien aportaba el dinero de la investigación, aunque el Gobierno andaluz abogó por dejar la decisión en manos de la Universidad. Por tanto, y puesto que la UMA ha aprobado seguir con el expediente, la investigación se reactiva.
El campus malagueño abrió expediente tanto a Errejón como al director del proyecto, Alberto Montero (también dirigente de Podemos), por un supuesto incumplimiento de contrato del primero, ya que debía trabajar 40 horas semanales en las instalaciones de la institución malagueña y él mismo reconoció que no lo había hecho. Errejón estaba vinculado a la UMA desde el 17 de marzo de 2014 para realizar una investigación sobre la vivienda en Andalucía y su sueldo era de 1.825 euros brutos al mes (cobró durante nueve meses). Tras conocer el resultado de la investigación realizada por el servicio de Inspección, la rectora decidió la apertura del expediente disciplinario y, en el caso de Errejón, la suspensión de empleo y sueldo.
Ese documento incidía en el incumplimiento de la obligación de trabajar de manera habitual en las dependencias de la UMA. El dirigente de Podemos realizó sus trabajos en Madrid previa autorización verbal de Montero (profesor de Economía Aplicada en Málaga), que justificó esta circunstancia por “el acceso a bases de datos y bibliografía de la que se carece en Málaga” y por “la posibilidad de contactar directamente con actores implicados en el derecho de defensa de la vivienda”. El expediente consideraba oportuno verificar estas circunstancias.
La investigación del instructor también recogía que se entregaron como prueba algunos documentos informáticos que parecían actualizados antes de firmar el contrato. “Existen ficheros que tienen fecha de última modificación anterior al 17 de marzo, momento en que [Errejón] fue contratado”, decía el informe. Para aclarar esto, se consideraba “necesario y conveniente que especialistas del Servicio Central de Informática de la Universidad de Málaga pudieran emitir su parecer”. Según las fuentes consultadas, en este apartado no habría ninguna novedad.
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