PSOE e IU piden no cerrar aún elacuerdo con el magnate chino

Los portavoces del PSOE y de IU en el Ayuntamiento de Madrid, Jaime Lissavetzky y Ángel Pérez, respectivamente, pidieron ayer a la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, que no cierre ningún acuerdo con el magnate chino Wang Jianlin sobre el proyecto de Campamento (una inversión urbanística de unos 3.000 millones) a pocos meses de las elecciones.

Lissavetzky destacó la necesidad de “transparencia” en las conversaciones, al tiempo que consideró que “a estas alturas de la película”, es decir, “en esta etapa final de su mandato”, la alcaldesa no debería llegar a acuerdos.

En su opinión, Botella no debería dar ningún paso que fuera más allá de la “cortesía” y la “obligación de una alcaldesa” de recibir a un empresario interesado en invertir.

Para el socialista, la “operación lleva encima de la mesa muchísimo tiempo” y “merece un debate bastante a fondo”, para no tomar decisiones “en función de una coyuntura de crisis económica”. “Nunca estaremos en contra de las inversiones del sector privado, pero vamos a hacerlo armónicamente, ordenadamente, máxime en estos tiempos en los que estamos a cuatro meses de las elecciones”, agregó.

Por su parte, el líder de IU, Ángel Pérez, cuestionó que se “comprometa” la actuación del Ayuntamiento a pocos meses de las elecciones, ya que “habría que pensar en una operación de carácter más amplio”, dado que afectaría al eje de la N-5. “Es una zona delicada en el que hay grandes cargas urbanísticas y vertebra puntos calientes de la Comunidad, con pueblos tan importantes como Móstoles y Alcorcón e infraestructuras como Xanadú y la Ciudad de la Imagen, y con un barrio de Batán fracturado por la única autovía de carácter urbano”.

Añadió que lo primero es “discutir el impacto urbanístico” y ver “si es algo verdaderamente rentable socialmente, que va a generar empleo, que es una actividad económica productiva, y que no es lesiva desde el punto de vista social”.

Por su parte, el portavoz de UPyD, David Ortega, se manifestó “a favor de todo lo que sea inversión”, pero “no a cualquier precio” y “no sin ningún tipo de límites”, por lo que señaló que el modelo productivo de la ciudad no puede basarse solo en casinos y que habrá que ver si el proyecto de Campamento va a ir acompañado del desarrollo de las dotaciones previstas.