Un fondo de inversión construirá un hotel de gran lujo en Cadaqués
El derribo del Rocamar tiene el visto bueno del Generalitat
Un fondo de inversión europeo, con una familia de empresarios rusos afincada en Cadaqués al frente, ha comprado el hotel Rocamar de esta localidad, situado en pleno Cap de Creus, con la intención de derribarlo y construir un nuevo establecimiento de gran lujo. El nuevo hotel, que tiene el informe favorable de la comisión de Patrimonio de la Generalitat, estará principalmente dedicado a los tratamientos de la salud.
Hace poco más de un año un fondo de inversión holandés, representado por una familia rusa, adquirió el Hotel Rocamar, situado en un entorno declarado desde 1995 Bien Cultural de Interés Nacional (BCIN) y de protección. Se trata de un establecimiento de tres estrellas abierto a una luminosa bahía y rodeado por un paisaje de pizarra gris y olivos. Su estructura, de planta baja más cuatro plantas, con un total de 80 habitaciones, sobresale en el perfil del conjunto histórico de esta población conocida por ser refugio de Dalí.
Se tratará de un hotel orientado a los tratamientos de salud, por lo que dispondrá de un spa, un gimnasio o un centro de talasoterapia
El objetivo de sus nuevos propietarios es derribar el viejo edificio y construir otro en esta parcela de más de 14.500 metros cuadrados. El proyecto, de OAB Arquitectos, prevé una estructura nueva, con planta baja más dos pisos, más escalonadas e integradas en la montaña. Esto debe generar un menor impacto visual que la edificación actual. El alcalde, Joan Figueras, que ha calificado la obra de “gran proyecto”, ha destacado que intenta integrarse en la idiosincrasia característica de esta localidad y que para ello también se usarán materiales propios de la zona.
Además, se tratará de un hotel orientado a los tratamientos de salud, por lo que dispondrá entre otros, de un spa, un gimnasio o un centro de talasoterapia. Otro de sus reclamos será la cocina. Además del restaurante del Hotel, se construirá otro, ambos de alta calidad. En cuanto a la decoración, el nuevo hotel, que mantendrá el anfiteatro situado en la finca donde se programan entre otros, conciertos del Festival Internacional de Música de Cadaqués.
El Ayuntamiento, que solicitó los informes de Turismo y Patrimonio para poder conceder la licencia de obras, está a la espera de disponer de ambos documentos favorables para poder llevarlo a junta de Gobierno y otorgar la licencia. Figueras calcula que este trámite podría estar en unas semanas. En cuanto al plazo de ejecución, el nuevo establecimiento debe ser una realidad en unos dos años. Hay varias opciones todavía sobre la mesa para realizar el derribo. Al Ayuntamiento le preocupa especialmente cómo se retirarán los escombros, sobre todo si tuvieran que pasar grandes camiones a diario por el casco antiguo de Cadaqués.
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