Los directores reclaman a Català que las clases comiencen una semana más tarde

Tras dos semanas de accidentado inicio de curso escolar, la consejera de Educación, María José Català, ha comenzado a abrir vías de diálogo con los agentes educativos. Primero fue, ayer, con la mesa de directores y la propia consejera presidiendo la cita. Hoy, miércoles, el secretario autonómico, Manuel Tomás, se ha reunido con representantes del Sindicat d'Estudiants, que mantiene para el jueves una convocatoria de huelga secundada por los sindicatos STEPV y CC OO PV.

Los directores pidieron ayer a la consejera que las clases comenzaran una semana después del arranque del curso escolar, según han asegurado fuentes de la reunión, tras la experiencia del inicio de las clases el dia 3 de septiembre. En su comunicado sobre la reunión, la consejería destacaba que los integrantes de la mesa habían "valorado positivamente el adelanto de los exámenes de recuperación de Secundaria al mes de junio y han felicitado el esfuerzo de la consejería por lograr que la plantilla docente estuviera completa el primer día del curso escolar". Pero no decía nada sobre el calendario escolar.

Las fuentes consultadas reconocen que las adjudicaciones de profesorado interino y con expectativa de destino se habían hecho más pronto que nunca. Pero insisten en que solicitaron a la consejera mayoritariamente que para próximas ocasiones se iniciaran las clases una semana después del inicio oficial del curso, porque este año no ha habido tiempo material de organizar adecuadamente los centros antes de comenzar la actividad lectiva: reuniones de claustro, tutores, acogida, etcétera.

En cuanto al encuentro con el Sindicat d'Estudiants que ha tenido lugar esta mañana, no se ha producido ningún acuerdo, aunque los propios representantes estaban sorprendidos de que hubiera sido atendida su solicitud de reunión, que entregaron el viernes pasado, cuando 2.000 estudiantes se concentraron en la puerta de la consejería. También es cierto que no había mucho margen si la reunión se pretendía previa a la huelga convocada para mañana. 

  Los representantes estudiantiles han entregado al secretario autonómico su "decálogo  reivindicativo contra el desmantelamiento de la enseñanza pública". Los primeros dos puntos se refieren a los acontecimientos recientes: climatización inmediata de los centros y cuelta al inicio de las clases del curso pasado.

El tercer punto se refiere a la construcción de los centros públicos necesarios para eliminar los barracones existentes y, el cuarto, la desmasificación de las aulas, "contratando a todo el profesorado interino despedido, así como el profesorado necesario para garantizar 25 alumnos por aula en Secundaria y Bachillerato". También reclaman la readmisión de los niños de Infantil del colegio Ciutat de Cremona.

En declaraciones a los periodistas, Manuel Tomás ha calificado el inicio de curso de "muy normalizado", y ha defendido las decisiones adoptadas por la consejería, porque "están en función del interés general".  Ha trasmitido al sindicato de estudiantes que para la consejería  lo prioritario es "garantizar el derecho a la educación". A su juicio, la convocatoria de manifestaciones por parte de los estudiantes están "injustificadas".

 En cualquier caso, el sindicato no va "a eliminar ninguno de los diez puntos de la tabla", que concluye con los puntos referidos a la retirada del amianto de los centros escolares y un aumento "drástico" de los presupuestos para Educación. No lo hará mientras no cambien las situaciones denunciadas, ni va a desconvocar la huelga prevista para mañana. Así se lo han manifestado a Manuel Tomás sus representantes, asegura Ainoa Murcia, una de las asistentes a la reunión.