Moragues renegocia a la baja el plus de los empleados de las consejerías
Consejero y sindicatos buscan una salida al incumplimiento del acuerdo de 2013
El consejero de Hacienda, Juan Carlos Moragues, propuso ayer a los sindicatos de la función pública una fórmula para sortear el incumplimiento del acuerdo firmado en octubre de 2013.
La Consejería de Hacienda y Administración Pública anunció el pasado mes de agosto que no implantaría la carrera profesional entre los empleados de las consejerías (un complemento salarial que afecta a 17.000 trabajadores públicos) por falta de presupuesto. Ayer, el Consell realizó una contrapropuesta a la baja para desactivar las protestas convocadas contra el consejero por CC OO, UGT y CSIF.
La oferta consiste en empezar la valoración de méritos, que está paralizada, y someter la remuneración de los mismos a la “disponibilidad presupuestaria”. Moragues avanzó que la partida destina a la carrera profesional en 2015 podría oscilar entre los cinco y los seis millones de euros. Una cifra que representa aproximadamente un tercio menos de lo previsto en el acuerdo que firmaron el Consell y los sindicatos de la Función Pública —todos menos Intersindical— en 2013.
Para los sindicatos, que necesitan un buen clima para que el Consell cumpla con los pactos que contribuyen al sustento de su estructura, la contraoferta supone una salida airosa ante sus afilados. De ratificarse el pacto, la carrera profesional se introducirá entre los empleados de las consejerías, aunque la cuantía de este complemento quedará supeditada a la disponibilidad del presupuesto.
“En el primer año de devengo de la carrera profesional no podemos ser muy ambiciosos”, reconoció Moragues, “pero sí que vamos a ir dando pasos progresivos hasta su total implantación. Durante el primer ejercicio presupuestario de implantación de la carrera profesional horizontal, el gasto público máximo estará entre 5 y 6 millones de euros”.
Los empleados de la Administración general de la Generalitat serán los últimos en tener este complemento que ya tiene el personal sanitario y los docentes —mediante la fórmula de sexenios—. La introducción de la carrera profesional en las consejerías provocó serias reticencias en el Ministerio de Hacienda, que dirige Cristóbal Montoro, al considerar que la Generalitat no realiza los esfuerzos suficientes para intentar alcanzar los objetivos de déficit fijados por ley en el presupuesto de la Generalitat.
