El arzobispado se aparta de Cotino en la visita del Papa a Valencia
La Fundación V Encuentro Mundial de la Familia comunica que su elección no fue de la Iglesia
El arzobispado de Valencia pone distancia con el presidente de las Cortes Valencianas, Juan Cotino, quien en poco más de un mes ha tenido que descartar cuatro veces que vaya a dimitir como consecuencia de su implicación en escándalos de corrupción. El presidente efectivo de la Fundación V Encuentro Mundial de la Familia, Esteban Escudero Torres, ha respondido a los requerimientos que hizo el juez José Ceres a finales de julio para reunir indicios documentales sobre el papel de Cotino en la organización de la visita del Papa a Valencia en 2006, en la que la trama Gürtel obtuvo 7,4 millones de euros por el contrato de la instalación de pantallas con Ràdio Televisió Valenciana (RTVV) a través de la UTE Trasgos y Orange Market.
El último informe entregado al juez por la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal sitúa a Cotino en el centro de la trama, como el "elemento nuclear, en el sentido de ser el responsable último en la toma de decisiones". Declaraciones de varios testigos, correos intervenidos y algunos documentos aluden a Cotino como participante en reuniones en las que se abordaron los pliegos del concurso para la instalación de pantallas gigantes en Valencia para cubrir el evento.
En la documentación aportada por la fundación al juez respecto al nombramiento de los componentes del denominado grupo de trabajo preliminar relacionados con las contrataciones y las infraestructuras, la fundación constata que el ahora presidente de las Cortes Valencianas formó parte habitualmente de las reuniones tanto del grupo como del patronato. La fundación no tiene registro documental del nombramiento de Cotino, quien, señala, en este grupo se encargó de "diferentes tareas" que realizó "a título gratuito".
Sin embargo, el presidente de la fundación hace constar expresamente que ese grupo ya estaba constituido en la primera reunión a la que acudió y que en ningún caso sus integrantes fueron nombrados a propuesta del arzobispado de Valencia, sino por el resto de miembros del patronato: “Bien la Generalitat, bien la Diputación [de Valencia]”. Contrariamente, Cotino ha asegurado en varias ocasiones ante la presión de los acontecimientos que solo colaboró en la organización "como voluntario" por su condición de católico y que fue "invitado por un arzobispo [el desaparecido Agustín García-Gasco]".
El grupo de trabajo estuvo formado por José Selva (coordinador del área de infraestructuras y logística), Felipe Gómez (área de finanzas), Henar Molinero (secretaria general), Javier Arnal (área de comunicación), Miguel Domínguez (coordinación de seguridad como concejal) y Juan Cotino. Selva fue sustituido en abril de 2006 por Pedro Hernández, a quien Cotino nombró subdelegado del Gobierno en 2003. Algunos testigos lo sitúan como "la mano derecha de Cotino". Arnal fue asimismo reemplazado por Rocío Casanova, pasando a ser enlace con el asistente del portavoz vaticano. La fundación carece de documentación sobre sus nombramientos y desconoce a propuesta de quién fueron designados.
El presidente de la fundación admite la existencia de un contacto con Álvaro Pérez, El Bigotes, sobre la contratación del grupo musical Il Divo, pero aduce que nunca se hizo efectiva. En la misma línea de apartarse del foco, comunica al juez que carece de documentación sobre Trasgos y Orange Market y que no conoce la existencia de documentos relacionados con la cesión de la señal institucional por parte del patronato para la retransmisión del evento a RTVV. Ni siquiera quién pudo participar en esa decisión.
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